martes, 23 de diciembre de 2014

La canción del 2015 para Chile

Pase lo que pase, “no importa, sé que hay muertos que alumbran los caminos”.

Andrés Figueroa Cornejo  
 
¿Qué remedio si nos toca por pago y contingencia nacer en un paisito afilado como viento que se cuela por la cerradura, vanguardia y experimento del capitalismo caníbal, lugar donde todo lo han vuelto mercancía, cada uno para sí, delirio de corbata uniformada, paradigma del Imperio, Estado policial en forma, sociedad con cámaras de vigilancia repetidas y cuando llega a fallar una, no importa, porque ya están dentro de la cabeza de los clientes y consumidores, pauteando los sueños, normando el terror, disciplinando el miedo; saqueando a pala las piedras valiosas, los bosques, el agua, las zonas de cultivo;  enriqueciendo a un puñado con la deuda y la sobreexplotación humana?

Ni más nos cabe ser Mapuche, estudiante y trabajador atento, autoconsciente que le dicen, mujer insurrecta, cabro chico curioso, militante que sospecha de las historietas bíblicas, de los atajos, de los instituido y de las instituciones, de la dictadura del capital a la manera de la democracia representativa –lo único que carece de crédito en Chile-, el partido único bicéfalo, tal cual Usamérica, la miseria a cuotas, la cuotas diarias de la miseria.

¿Y si sabes que eres migrante en tu propia plaza, que somos africanos antiguos y repartidos, que la vida siempre y siempre está en otra parte; que somos sólo historia, genética en movimiento que muta por necesidad, relaciones sociales, voluntad colectiva y accidentes? ¿Qué es lo que ocurre, chileno/a, si un buen día y entre todos/as nos percatamos como destello que el miedo no es más que el medio que estrategia el poder para mantenernos enrielados?

En Chile, el pueblo trabajador ya no es ni proletario. ¿Qué prole posible si todos los días son más caros, si rodearse de hijos es privilegio del Opus Dei, aleta fundamentalista de los que mandan, y todos los derechos sociales se pagan con horas extras, hipotecando la hora del amor y del ocio y de la recreación y del descanso y de la convivencia?

Cuando termina el 2014, se derrumban los índices macroeconómicos, la crisis no cede, se multiplica como peste la flexibilidad laboral, la inmensa mayoría no está organizada todavía, la minoría sindicalizada se atora por una caja de mercadería y un bono simbólico para pasar la navidad y el cambio de año. En el centro de la capital de Chile hay más vendedores ambulantes que compradores abundantes, y el gobierno de turno, como la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC, gremio que agrupa al empresariado), hace vista gorda. No vaya a ser que si no los dejamos ofertar baratijas en la vereda, los repobres se conviertan en un ejército de delincuentes –monopolio intocable del sistema financiero, por favor-, y entonces las evaluadoras de riesgo nos pongan mala nota, espanten a la inversión y termine por mudarse en tumulto al Perú o a Tailandia o a Colombia o a la incertidumbre bursátil de los casinos centrales, o a los paraísos fiscales (uno distinto al que opera en Chile, claro), o se incline por apostar al loteo de la luna y de Marte, que ya el planeta se hizo chico para la concentración capitalista.

Pero el 2015 se viene fuerte y despeinado. Desobediente, insubordinado. La gente no hace más que hablar de trabajo, de lo que debe, de cambiar la carne por tallarines con salsa barata y pan con queso laminado. Mientras tanto, los jóvenes no sólo dedican los lunes a platicar sobre la cantidad récord de cervezas que bebieron y las chicas y chicos que se tiraron el fin de semana. Buena parte de ellos prueba en los hechos que la educación secundaria, técnica, superior, no es garantía de movilidad social, no es garantía de seguridad. Decepción, incertidumbre, notificación de la irracionalidad de abarrotar el territorio laboral con sobreproducción de profesiones que abaratan el precio del trabajo. El automóvil destruido antes de poder comprarlo, la habitación embargada antes de poder costearla. El mito de una clase media chilena golpeada por la precarización, la rotación laboral a velocidad lumínica, la deslocalización, los contratos indefinidos como adquisición escasa, los emprendimientos microscópicos condenados a los precios impuestos por el capital financiero, la gran minería, la agroindustria transnacional, el retailer en expansión. La transferencia de las pérdidas del capital-bestia a las mini-pequeña-medianas empresas. Una burguesía chilena de capitales combinados con Monsanto, Walmart, las mineras chinas o gringas que, como jamás antes, atraviesa fronteras y obtiene más utilidades de la explotación de humanidad y naturaleza de afuera del país que de adentro. ¿Se puede, a estas alturas del partido, hablar de afuera y de adentro? No. Ni en el almuerzo dominguero ni en medio de la economía mundializada y financiarizada. Caducaron los refugios en Internet y en las tecnologías de la telefonía celular. Aquí no nos socorre ni Pilar Sordo, ni los santos enyesados –agobiados por la sobredemanda-, ni el sálvese quien pueda.

¿Pero qué habita y sufre el rebelde? La contradicción dura de la totalidad de las relaciones sociales capitalistas versus el ímpetu de cambiarlo todo. Sólo negación acuartelada en espacios artificiales y, mal que nos pese, permeados por esa propia totalidad capitalista. En consecuencia, el 2015 también tendrá que ser el empeño lúcido de superar el aparatismo, como el movimientismo. ¿Por qué? Porque el primero no tiene cintura para rimar con la lucha de clases concreta y, por tanto, se aísla rápidamente, se vuelve secta. Y el segundo únicamente es un momento de la recomposición del pueblo organizado, episodio necesario, pero insuficiente para concursar siquiera a ser reconocido como enemigo del poder. El desafío está planteado y en curso de constitución. Su cronograma está digitado por la lucha de clases, pero –y no hay alternativa- debe preexistir  como fuerza que permanece creativamente y es capaz de soportar y trascender las coyunturas, los altibajos, la euforia y la depresión. Igual que una gesta larga que se nutre de lo mejor de cada casa. Un continente en crecimiento conflictivo, inestable, crítico y autocrítico, pero, a la vez, blindado y estratégico. Transformación y contención. A un capitalismo de vanguardia, una vanguardia popular condensada, volcánica, internacionalista, democrática por ejercicio y definición. Una fuerza y energía organizada, por lo menos, con la estatura de su enemigo. Ciencia y arte. Sistematización de la experiencia combativa de los pueblos e imaginación política en tensión.

Pero ya será 2015. Quien escribe, desconfía de los propietarios y de la propiedad desde niño. Como la mayoría, nació para amar. Su fuerte jamás ha sido la violencia. ¿Qué más querría que se disolvieran por razón y humanidad los intereses de unos pocos que se adueñan del trabajo y la biodiversidad de los muchos? En fin. La costilla izquierda de los jesuitas le modificó el ADN muy temprano. Por eso no sabe si Dios -¿cuál de todos?-, pero sí hace suyo al Cristo de los pescadores, las trabajadoras sexuales, los humillados. Excusen su contradicción flagrante.

Para mis hermanos/as, mis compañeros/as, mis amigos/as, mi familia elegida y parte de la no elegida, todos los abrazos. El 2015 será de talento y muchísimo trabajo. La libertad y la igualdad necesarias nos siguen colocando en la estacada. Vaya la ternura de este sencillo escribidor y peleador social y político. Vaya el beso, la mano, la cabeza que organiza y el corazón que ama. Y pase lo que pase, “no importa, sé que hay muertos que alumbran los caminos”.

Diciembre de 2014, bajo el solsticio de verano en el fin del sur del mundo.

jueves, 18 de diciembre de 2014

“El pueblo chileno no tiene otra alternativa que ganar”

Entrevista con Manuel Erazo Soto, estudiante de la Universidad Arcis, hijo de la rebeldía. Manuel protagonizó la irrupción a la comisión parlamentaria mientras sesionaba sobre esa institución en crisis, y encabeza el movimiento contra el alza de aranceles de la enseñanza privada. “Somos el germen que, ampliado, se llama comunismo”.

Andrés Figueroa Cornejo  

Al mediodía del 15 de diciembre de 2014, el estudiante de Antropología de la Universidad de Artes y Ciencias Sociales, Arcis, Manuel Erazo Soto (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=163358), interrumpió junto a otro compañero el curso plácido y pre-navideño de la sesión de la comisión parlamentaria que dice investigar las razones de la crisis de esa institución de estudios superiores (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=192582).
Manuel Erazo viene de abajo y se encumbra por convicción personal y colectiva, por lucha e iniciativa. Hijo de obrero y de madre dueña de casa  y costurera, es uno entre 5 hermanos. De su infancia, Manuel recuerda en especial “la batalla de mi familia por la subsistencia diaria, de lo que cuesta comprar un kilo de pan y pagar la electricidad. De trabajar desde los 9 años en los empaques de los supermercados. Yo vivo en una zona de la comuna de Santiago que al principio era terreno de chacras. La ‘civilización’ llegó con las instalaciones de los supermercados y del agua potable. También pasé mi niñez con mi abuelo en la villa México de la misma comuna. Mi familia es pueblo”.

-Los sociólogos que justifican la miseria y la juventud chilena apabullada por la droga, te habrían situado en el lumpen. ¿Qué explica tu conducta y consciencia de clase?

“El 2006 vi por la televisión a un grupo de dirigentes secundarios de los calificados colegios públicos emblemáticos –el Instituto Nacional, el Carmela Carvajal, etc.-, hablando de lo mal que está la educación. Yo provengo del Centro Técnico Profesional de Maipú, un establecimiento municipal donde llegan los estudiantes de secundaria expulsados de todos los colegios. Era de los que leían, con suerte, las primeras 15 páginas de los libros: un ‘flaite’ más entre tantos (http://es.wikipedia.org/wiki/Flaite). Entonces, sin militancias partidistas previas, me di cuenta de que la realidad de mis compañeros y mía era bien distinta a la de los muchachos aparecidos en la tele. Al día siguiente conversé con los chicos de mi curso sobre la urgencia de movilizarnos por lo que ocurría en el país. 48 horas después paramos las actividades regulares del liceo y asistimos por primera vez a una manifestación en el centro de Santiago. Como llegamos atrasados, nos dirigimos a las dependencias del Ministerio de Educación (MINEDUC). Ya éramos medio millar de pingüinos frente a una institución gubernamental cercada por la policía. Allí no teníamos nada que hacer, así es que marchamos por la Alameda hasta la Universidad de Santiago (USACH), a una media hora del ministerio. En el camino se fueron sumando más chicos. Cuando arribamos a la USACH nos preguntaron quién era el dirigente. Los dos mil que éramos me señalaron a mí. Le propuse a los universitarios que cortáramos la Alameda donde protestamos hasta las 9 de la noche. Ese fue mi ‘bautismo de fuego’.”

-¿Y qué pasó luego en tu liceo?

“En menos de una semana nos tomamos el colegio. Ahí aprendí a hablar, a dirigirme a la asamblea. Que en la lucha tenemos que ser los primeros en estar adelante, los primeros en llegar, los primeros en saltar la reja; el primero que se levanta y el último que se acuesta.”

“Todos podemos ser Ernesto Guevara”

-Lo que dices, me recuerda inmediatamente la poli-ética de Ernesto Guevara. ¿Qué significado tiene para ti su figura?

“Yo descubrí que Guevara es un compañero. Que está muy lejos de los mitos y los altares. Que no es un ícono inaccesible. Que está en la huelga, que toma posición ante una movilización, que entrega un volante en la calle. Todos podemos ser Guevara. Es un ser humano que lucha por la liberación del pueblo.”

La insubordinación

-¿Qué pasó y por qué interrumpieron la comisión parlamentaria en el ex Congreso Nacional (ver link al final de la entrevista)?

“En la Arcis estamos en la más absoluta incertidumbre desde abril de 2014. No sabemos si la universidad continuará o no el 2015. La rectora Elisa Neumann dice que sí, pero nadie sabe en qué condiciones. Hemos realizado alrededor de 10 manifestaciones masivas, tomas del MINEDUC, de sedes parlamentarias. En este contexto, la UDI (partido político de la derecha más fundamentalista) armó una comisión investigadora sobre las irregularidades de la Arcis. Sin embargo, nosotros consideramos que esa comisión es un show y que no está resolviendo nada, cuando la comunidad universitaria precisa de todo lo contrario.”

-¿Qué ha hecho la comisión hasta ahora?

“La comisión sólo se ha dedicado a discutir respecto de responsabilidades menores en la crisis de la institución. En su interior están pactando desde la UDI hasta la dirección del Partido Comunista chileno (PCCh), debido al caso Penta (http://es.wikipedia.org/wiki/Empresas_Penta). En consecuencia, están inhabilitados para solucionar nuestra situación. Por lo mismo, nosotros, los estudiantes, no estamos dispuestos a que se utilice a los trabajadores a cambio de dividendos electorales baratos.”

-¿Cómo  sucedió la irrupción que protagonizaste mientras sesionaba esa comisión?

“Lo primero que hicimos fue arrojar los documentos de la comisión sobre la mesa en la que se encontraban reunidos. Se levantó el diputado de derecha Felipe Kast, diciéndonos que él nos podía responder, pero lo emplazamos inmediatamente a callarse por ser ‘un payaso más de este circo’. Después la diputada de las Juventudes Comunistas (JJCC) Karol Cariola, que debió haber creído que éramos ‘de los suyos’, intervino en  ‘buena onda’, y también le pedimos que se sentara porque ella es una cómplice pasiva de la crisis de la universidad. Lo más probable, es que parte de su campaña electoral haya sido financiada por nuestras propias matrículas. Luego le tocó el turno a la diputada democratacristiana Yasna Provoste (http://es.wikipedia.org/wiki/Yasna_Provoste), ex ministra de Educación de la Concertación y que incluso resultó destituida para ejercer cargos públicos hasta el 2013 a través de una acusación constitucional por problemas de negligencias millonarias en las subvenciones estatales a los colegios. A ella le recordé que yo mismo le había manifestado en el 2006 y 2007 que yo acabaría en una universidad privada por provenir de un colegio tremendamente precarizado. Y, claro, por eso estoy en la universidad privada Arcis. Por tanto, la hice responsable directa de la situación de mis compañeros y mía. Ella me reconoció, y como los demás diputados, bajó la cabeza. Varios parlamentarios huyeron de la sala. Temblaban de miedo. Uno de ellos nos dijo que ‘esa no era la forma como los estudiantes deben manifestarse’. Esa es su forma de relacionarse, pero no es nuestra forma. Nuestra forma no es institucional. Nuestra forma es la relación cara a cara, mutua, entre iguales, y no entre una elite y el resto de la gente. En ese momento comprobamos que los políticos le tienen miedo al pueblo y a la verdad. En suma, la única respuesta sobre la crisis universitaria que sufrimos fue ser desalojados por los guardias. Rectoría ahora culpa a los estudiantes morosos de la falta de recursos. ¿Pero cómo pagar los sueldos de las autoridades sin saber qué va a suceder con nosotros el año entrante? Por eso también llamamos a los estudiantes a no pagar un peso hasta no tener certezas del porvenir de la entidad.”

-En ese instante, pero en otra sala del mismo edificio, la presidenta Bachelet le rendía un homenaje a los 25 años del triunfo electoral del golpista y democratacristiano Patricio Aylwin, y que inauguró el actual ciclo de gobiernos civiles…

“Nosotros desconocíamos la información. De saberlo, hubiéramos ingresado a esa ceremonia. Es una enorme falta de respeto homenajear a uno de los principales instigadores del golpe de Estado de 1973 contra el gobierno de la Unidad Popular.”  

La actual coordinadora contra el alza de los aranceles

-En gran parte del sistema educacional (universidades, institutos profesionales, centros de formación técnica, enseñanza primaria y secundaria) existe un aumento arbitrario de los aranceles y matrículas. ¿Tienen algún planteamiento al respecto?

“Una de las primeras cosas que hicimos fue partir con el dirigente Felipe Sánchez (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=190566), a la toma estudiantil de la Escuela Moderna (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=192771). Nos percatamos de que ellos viven el mismo incremento indiscriminado que la Universidad Alberto Hurtado, la Andrés Bello, la Silva Henríquez, la Central y otras. Los aumentos van desde un 6 a un 13%. Realizamos rápidamente una asamblea contra el alza el lunes 15 de diciembre donde participaron alrededor de 15 representantes de distintas casas de estudio movilizadas. Allí mismo formamos la coordinación contra el alza a través de un plan de lucha.”

-Con la reforma o sin la reforma educacional del gobierno, los problemas de la enseñanza en Chile continuarán el 2015. ¿No han pensado en la creación de algún instrumento unitario que le ofrezca mayor fuerza, estabilidad, continuidad y planificación a la lucha común del estudiantado?

“Ese es el objetivo fundamental de la coordinación desde su punto de arranque. Pero nosotros no nos estamos reuniendo con aparatos –que ya existen, por cierto, sino que consideramos que hay que dar un salto superior con el estudiante mismo que está movilizándose. Hoy la crisis es mucho más tangible y, además, tenemos más experiencia en el cuerpo.”

“Y ahora tenemos que ganar. No tenemos otra alternativa.”

-Tú eres un estudiante-trabajador, y un hijo de la particular y limitadísima democracia, o del actual formato de la dictadura del capital en Chile. ¿Cómo te imaginas la sociedad del futuro?

“Creo que las luces vienen de la mano de la realización de la solidaridad concreta que vivimos en las distintas formas de las luchas de nuestro pueblo (ambiental, Mapuche, sindical, de la disidencia sexual, contra el patriarcado, etc.), que tienen una misma raíz y que, por ejemplo, el marxismo ortodoxo no logra explicar. Hoy se están construyendo nuevas relaciones sociales (eso que Guevara llamó ‘el hombre nuevo’). Ese germen ya existe. Es preciso articularlo. Que en Chile exista un sinnúmero de colectivos anticapitalistas habla por sí solo de la necesidad de aquello nuevo que adviene. Nuestro desafío es cómo convertir a ese germen coordinado y en lucha en un proyecto ampliado de sociedad totalmente otro al dominante. Y cada uno de nosotros/as es la condensación del partido revolucionario necesario y en proceso de formación. Yo creo que ese germen que protagonizamos mientras se multiplica, se llama comunismo, porque, al decir de Salvador Allende, ‘la historia es nuestra y la hacen los pueblos’. Y ahora tenemos que ganar. No tenemos otra alternativa. Nuestro pueblo ya comprendió y la nostalgia está prohibida, como tampoco podemos recrear los antiguos instrumentos políticos de los cuales se dotó el pueblo en otras épocas.”

viernes, 12 de diciembre de 2014

Chile: “La tarea es crear una nueva Central Única de Trabajadores para el siglo XXI con los principios de Clotario Blest”

La travesía creativa desde un sindicato clandestino hasta la democratización colectiva de una organización masiva que no piensa detenerse. Entrevista con Jorge Pizarro Álvarez, dirigente de los bodegueros de Walmart-Chile.

Andrés Figueroa Cornejo  

Como si el reloj-control que determina la medianoche de obreros azules fuera el orden natural de las cosas, ingresamos al tercer turno del centro de distribución logístico de la transnacional usamericana del retailer planetario, Walmart en Chile (http://es.wikipedia.org/wiki/Walmart_Chile). De estas bodegas donde se transita en tres minutos por cámaras de 30º grados bajo cero y 30º grados sobre cero, salen las mercaderías que alimentan a la cadena de supermercados Líder, Ekono, Líder Mastercard y SuperBodega ACuenta, Central Mayorista y Espacio Urbano en sus formatos diferenciados según la segmentación social de los consumidores.
Pero Walmart compró la industria al grupo económico Ibáñez sólo hace unos meses. La familia Ibáñez proviene en línea directa de Carlos Ibáñez del Campo, presidente chileno en dos oportunidades: alrededor de los años 30’ y de los 50’ del siglo pasado. El militar y político fue un fascista en regla: participó en un par de golpes de Estado antes de acceder al Ejecutivo mediante elecciones; se acriminó con comunistas y homosexuales, creó la fuerza de carabineros (a la italiana), se concentró en la policía política, y adoptó un programa nacional-desarrollista basado en el rol del Estado de conciliación de clases y promotor de la industria de sustitución de importaciones, como ocurrió al mismo tiempo en otros países periféricos del mundo. Por eso sus descendientes fueron bendecidos económicamente por la dictadura cívico-militar de 1973. A modo de agradecimiento y en los albores de los gobiernos civiles de los 90’, levantaron un busto del general Pinochet en medio de la corporación, como si fuera una dependencia castrense, y entre sus colaboradores centrales estuvo el reconocido violador de derechos humanos y ex embajador de la tiranía en la ONU y su ex delegado en la OEA, Sergio Diez o “Harry, el sucio” (http://es.wikipedia.org/wiki/Sergio_Diez).
La cadena de supermercados Líder se llamó comercialmente D&S en los 90’ y Dos Álamos durante la dictadura. Así fue entregada para la distribución de mercadería a la familia Ibáñez por el general Pinochet. Posteriormente, entre 2009 y 2010 comenzó el proceso de traspaso y venta desde el grupo Ibáñez a la transnacional Walmart, una de las tres corporaciones que controlan el retailer a escala global.
Jorge Pizarro es dirigente del Sindicato de Trabajadores Bodegas LTS D&S-Walmart y relata que incluso “miembros del Ejército visitaron varias veces a la empresa para estudiar el sistema logístico que se usaba aquí. Nosotros mismos, los trabajadores, tuvimos que enseñarles el modelo de abastecimiento AS400 (http://es.wikipedia.org/wiki/AS/400). Ya estábamos en los gobiernos civiles”.

La dignidad

“El 98% de los trabajadores/as de las bodegas de Walmart-Chile está sindicalizado. Por eso somos una de las organizaciones más importantes del rubro en el mundo”, dice Jorge Pizarro Álvarez, ex militante de las Juventudes Comunistas y combatiente antifascista durante la tiranía, y añade que “El sindicato nació el 2006, cuando estaban los Ibáñez. Ahí se realizó la primera negociación colectiva, con 256 trabajadores. El logro más valioso que obtuvimos fue la dignidad. Era lo que buscábamos ante tanto atropello, horarios de explotación sin fin, maltrato psicológico y físico. En esa época no teníamos idea de cuánto tonelaje de cajas con mercadería cargábamos por persona. Hoy sabemos que en cada uno de los tres turnos diarios, de 7.5 horas cada uno, el trabajador mueve entre 600 a 700 cajas que pesan 40 kilos por unidad.”

-¿Cuál era la remuneración de un bodeguero al 2006?

“De un trabajador recién ingresado, igual al salario mínimo. Si se enlistaba en el sindicato, comenzaba a gozar de los reajustes porcentuales conquistados. Y el promedio de edad de los obreros es de 30 años. Ahora, al 2014, la remuneración promedia los 600 mil pesos (USD1.000).”

Del sindicato clandestino a la colectivización masiva de la organización

-¿Cómo se generó la organización?

“Con unos compañeros teníamos el objetivo de crear un sindicato y me enteré en la propia Inspección del Trabajo que ya existía uno. Lo que ocurre es que se mantenía prácticamente clandestino. Era un activo que no superaba las 30 personas. Entonces nos sumamos en masa, llegando a los 256 que negociamos por primera vez. Luego de un mes, como no alcanzamos acuerdos con la empresa, nos lanzamos a una huelga que duró 26 días, a 48 horas de la navidad. Estábamos recién haciendo nuestras primeras armas. ¿Cómo podíamos negociar en buenas condiciones frente al grupo económico Ibáñez, uno de los más poderosos en Chile, cuando en general en el país la inmensa mayoría de los trabajadores, y nosotros no éramos la excepción, ni siquiera ha participado en un sindicato? Lo único que ganamos en plata fueron 5 mil pesos (USD8,5) para la locomoción. Pero lo que podría haber significado la destrucción de la organización en su primera pelea, lo transformamos en una adquisición estratégica: el respeto mediante el mejoramiento de las condiciones laborales elementales y un sistema de retiro voluntario genuino con una indemnización al 150% en relación a lo dispuesto por la ley.”

-Hasta el 2006, esto era una cárcel dura y pura…

“Antes del 2006 había incluso un gerente que impedía la salida de los trabajadores que ya habían cumplido su jornada con dos perros y una escopeta. La amenaza de despido era permanente y violenta. Ahora ya estamos mucho más organizados y maduros. De hecho, adicionalmente a la cuota sindical, hoy todos aportamos una plata a un fondo de ahorro para enfrentar los avatares de una negociación colectiva y la huelga, tal cual en los orígenes del movimiento obrero y las mutuales, donde las cuotas de los asociados estaban destinadas principalmente a resistir el período que puede durar una huelga. No existe nada nuevo que no contenga lo mejor de nuestra propia historia como asalariados.”

-¿Cuáles fueron los efectos inmediatos de una huelga y negociación tan peculiar, en un país donde la dictadura, antes que todo, se encargó de hacer trizas a la organización de la clase trabajadora, desaparecer, asesinar, torturar, encarcelar y exiliar a sus dirigentes? Vale recordar que el propio Salvador Allende en su famoso discurso final se despide especialmente de las y los trabajadores. Ni siquiera hace mención de los propios partidos políticos que estaban adentro o afuera de la Unidad Popular. Es decir, lúcidamente, Allende evidencia que el fascismo se dejará caer fundamentalmente sobre la clase obrera organizada.

“En efecto. Muchos de nosotros sabíamos eso entonces. La cuestión es que después de la negociación de 2006, la gente se integró masivamente al sindicato. Para la negociación de 2008, alcanzamos un 99% de sindicalización, en un Chile cuya fuerza de trabajo asociada no alcanza el 15%. De hecho, hasta nos dimos el lujo de no aceptar a algunas personas en la organización.”

-¿Y bajo qué criterios?

“Contábamos con una comisión de disciplina que había hecho acopio de quejas de diversos compañeros sobre el comportamiento “apatronado” de algunos  jefes de área y/o de turno. Esa decisión fue resuelta democráticamente en asamblea. Es decir, fue una medida sancionada colectivamente.”

Las condiciones de explotación

-¿Qué enfermedades y accidentes están asociadas al tipo de labor que efectúan los bodegueros?

“Atropellos de máquinas transportadoras, golpes, problemas en la espalda. El tonelaje de carga que cada uno de nosotros acumula en el cuerpo, comienza a hacerse visible con el paso del tiempo. Por eso hemos concluido que en la condición de seleccionador de pedidos, el cargo inicial en la empresa, sólo se puede durar 4 años físicamente. Después hay que renunciar o irse, porque las mutuales –empresas privadas de salud laboral- no reconocen ninguna de nuestras dolencias como enfermedades profesionales. Hemos sufrido accidentes muy graves, como el desprendimiento de pies. Los accidentes más severos se producen en las temporadas altas de exceso de producción (períodos de mayor demanda del retailer, como fiestas de fin de año, fiestas patrias, etc.). Hay bodegueros que se emplean en los galpones especiales destinados a los congelados (carnes), donde trabajan a 30º bajo cero. Ese es un trabajo pesado, pero no existe un sistema de regulación más allá de lo que indica el Ministerio de Salud en la ley 954, que sólo indica parcialmente cómo debe funcionar la labor humana bajo esas condiciones. Hay muchas fichas técnicas que establece un experto en prevención de riesgos y que están ligadas a la falta de concentración, de glucosa, de alimentación adecuada. Por ejemplo, una persona diabética no puede trabajar con los congelados. Sin embargo, legalmente el ámbito está en pañales. ¿Por qué? Porque es primera vez que en Chile opera un sistema de bodega de congelados como el que existe en Walmart. Lo que hay en el país son frigoríficos, pero son muy distintos a los congelados. En los frigoríficos la temperatura es mayor, mucho menor el tiempo de exposición del trabajador al frío, y los compartimentos son muy pequeños en términos comparativos. De acuerdo a estándares internacionales, los bodegueros que laboran en semejantes circunstancias, no pueden estar expuestos más de 20 minutos, luego de los cuales deben salir uno a uno y en compañía de otra persona. Pero aquí carecemos de salas de recuperación. Piensa que de menos 30º, se puede salir del galpón hacia una temperatura de 30º de calor (60º de diferencia), en segundos. Ahora bien, este sistema lleva apenas dos meses de funcionamiento y todavía desconocemos sus consecuencias.”

-¿Qué ha hecho el sindicato frente a estos problemas?

“En la penúltima negociación colectiva realizada el 2011, nos concentramos en el plano del trabajo pesado, donde se le permite al trabajador a jubilarse con 5 años de anticipación. Aquí cabrían perfectamente los bodegueros de los congelados, y están quienes cargan tonelaje excesivo.
Luego nos impusimos como desafío conocer en detalle el modo en que somos explotados, cuál es la tasa de accidentabilidad real, cómo son los sueldos, cómo se pagan; de dónde salen los recursos para sostener el área de logística (toda vez que Walmart gana por las mercancías que vende a boca de consumidor), etc.”

-¿Y cuál fue su principal conclusión?

“Que nuestro trabajo como centro de almacenamiento y distribución de mercadería, se traduce en un abaratamiento de los costos para la empresa. Es decir, el capital gana por el arriendo de almacenaje de mercaderías y por su reparto a los múltiples centros de venta. Somos parte de la cadena de la valorización del capital.”

Los trabajadores controlan la producción y la contabilidad real de la empresa

-Jorge, en esta oficina de la organización dentro de la misma bodega, pende una fotografía de Clotario Blest (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=116912)...

“No es ningún accidente romántico. Como Clotario Blest, nos conducimos de acuerdo a la convicción de que el pueblo trabajador es el protagonista de su propia liberación. Debido a ello, en la actualidad contamos con un mapeo completo de nuestra labor y, en consecuencia, llevamos un estricto control de la producción. Sabemos cómo se mueve la empresa y conocemos perfectamente nuestras necesidades. Aplicamos un sistema basado en lo que hizo el brasileño Lula cuando fue dirigente sindical. Esto es, poner el control de la producción al servicio de nuestros intereses. Así, colectamos información mediante los socios que se desempeñan en el conjunto de las partes de la empresa, y la ingresamos a una matrix. En síntesis, mediante ese método accedimos a la base misma de las negociaciones con el empresariado. Descubrimos hasta robos y casos de corrupción entre las gerencias que luego derivaron en sus despidos por la misma empresa.
Lo más difícil fue destruir el individualismo brutal originado en la dictadura y que se repite hasta hoy. Liquidamos los bonos de producción por persona y los convertimos en un beneficio común. Comenzamos a entregar estímulos morales a los mejores socios del sindicato frente a los “premios emocionales” de la compañía. Claro que debemos, cotidianamente, superar la contradicción entre el beneficio individual sistémico frente a la necesidad de la labor colectiva. Y como vector de nuestras negociaciones, mientras el patrón quiere producir más y pagar menos, nosotros asumimos el criterio de ganar más y trabajar menos. Esa es una de las “leyes” de nuestra lucha. Al final de la negociación de 2008 conseguimos aumentar al doble los salarios. Incrementamos el sistema de buses de acercamiento para los trabajadores. Hoy el sindicato administra 5 mil horas del Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (SEMCE), y los socios son los que deciden qué quieren estudiar. Podemos entregar hasta 5 becas de estudios universitarios, más un pozo adicional de 5 millones de pesos anuales para los trabajadores que deseen ingresar a la enseñanza superior. El criterio para entregar las becas tiene que ver con el compromiso de que quienes las usen luego viertan sus conocimientos entre los propios compañeros. Y para que estudien tranquilos, ordenamos nosotros mismos los turnos.”

-Es archi-sabido que una de las políticas sustantivas del capital, tanto para obtener ganancias rápidas, fortalecer la hegemonía financiera, como para reproducir el control social por arriba, es el endeudamiento individual. ¿Hacen algo al respecto?

“Aquí nos vienen a vender de todo, y la cultura del consumismo, aumentada por las carencias propias de nuestra extracción de clase, nos impone un desafío que debemos enfrentar urgentemente.”

-¿Y en las negociaciones posteriores?

“Consolidamos y aumentamos los derechos conquistados. Y fíjate que hasta ahora no he dicho una sola palabra del clásico bono de fin de conflicto que, lamentablemente, es a lo que se reduce la inmensa mayoría de las negociaciones colectivas de la minoría de los trabajadores que, estando sindicalizados, tienen la fuerza y organización suficientes para negociar algo en Chile. Ese bono lo transformamos en parte del salario mensual. Por otra parte, conseguimos, a través de mesas de trabajo permanentes, negociar prácticamente todos los días.

Clotario Blest: la experiencia, los principios y el fuego que no cesa

-Pero ustedes son dirigentes convencidos de la necesidad de la unidad de la clase explotada…

“Jamás lo olvidamos. Por eso hoy estamos embarcados en el acompañamiento, asesoría y formación de nuevos sindicatos. Y no cobramos. Es más, estatutariamente tenemos un ítem para colaborar con sindicatos más pequeños.”

-¿Podrías sintetizar los principios básicos del sindicato?

“Somos autónomos. Todo lo decide democráticamente la asamblea: desde las cuestiones más simples, hasta los petitorios para las negociaciones. A mitad de mandato, un dirigente puede ser revocado de su cargo con el 50% más uno de la asamblea. No dependemos de los empresarios, ni de los partidos políticos tradicionales, ni de ninguna central sindical. En especial de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), después de que en las elecciones parlamentarias de 2009 y sin preguntarle a nadie, su entonces presidente y actual secretario general, Arturo Martínez, fue candidato a diputado por el Partido Socialista. Le fue mal en las votaciones y, con elástico, volvió a la presidencia de la multisindical como si no hubiera ocurrido nada. Ahí se rompió la relación. Por lo demás, no creemos que ninguna central sindical existente sea representativa de la clase.
En los últimos tiempos del mandato de Arturo Martínez en la dirección de la CUT, junto con el alcalde de Quilicura (zona norte de Santiago, donde está la bodega), un militante de la ultraderechista Unión Demócrata Independiente (UDI), abrió una casa del trabajador en el territorio. Se multiplicaron las diferencias. La CUT entonces se involucró con Juan Moreno, un dirigente de la Federación de Trabajadores de Sindicatos Líder cuando era propiedad del grupo Ibáñez, y condujo una negociación de la mano con la empresa para crear un acuerdo marco que no les entregó a los trabajadores ningún mejoramiento salarial ni de condiciones de trabajo. Hasta hoy, Juan Moreno trabaja por un sueldo millonario para Walmart, y al mismo tiempo es asesor de la CUT que dirige Bárbara Figueroa. Y tampoco nos representa, toda vez que sigue siendo una extensión del gobierno de turno. Es más, me gustaría saber cuántos dirigentes que están en la CUT interpretan y representan a la clase trabajadora, como me gustaría saber cuántos están trabajando realmente. Que la conduzca una militante del comité central del Partido Comunista (PCCh), como Bárbara Figueroa, no significa nada a mediados de la segunda década del siglo XXI en Chile. El Partido Comunista de Chile es una secta.
Ahora bien, en estos momentos la Federación de Sindicatos Líder (Walmart), que se encuentra en medio de una huelga (http://sindical.cl/2014/12/8-mil-trabajadores-de-supermercado-lider-en-huelga-a-nivel-nacional/), tiene otros dirigentes, otra categoría de luchadores y luchadoras. Los consideramos como a nuestros pares. En este sentido, estamos en un proceso de conjuntar en una sola organización a todos los trabajadores de la compañía y negociar todos juntos, al mismo tiempo y directamente con la gerencia. Para allá vamos.”

-¿Cuál es, entonces, el camino del nuevo sindicalismo chileno?

“Unidad, trabajo en equipo, independencia, etc. La verdad es que la tarea es formar una nueva Central Única de Trabajadores con los principios básicos de la CUT de Clotario Blest, de acuerdo a las formas presentes del trabajo y el capital. Y lo podemos hacer. No tengo dudas.”

Chile: Venimos a denunciar la invasión de casi 40 años del reino de Marruecos contra el Pueblo del Sahara Occidental

Solidaridad chilena con el Pueblo Saharahui se concentró en las puertas de la embajada de Marruecos en Santiago de Chile: "Que tiemble la injusticia cuando luchan los que no tienen nada que perder".



Somos humanidad reunida en Chile por la causa justiciera y solidaria con la soberanía y autodeterminación del Pueblo Saharaui y de la República Democrática del Sahara Occidental.

Desde  1979 que la Organización de las Naciones Unidas deploró la invasión marroquí y existen numerosas resoluciones que señalan que el destino del Sahara está en manos de la población saharaui. El Frente Polisario desde 1979, es reconocido como el representante legítimo del pueblo saharaui y tiene un estatus oficial autorizado por las Naciones Unidas, donde cuenta con una delegación permanente.

Mientras que para la ONU, el Sahara Occidental es una colonia cuya potencia administradora de iure (a pesar que mire para otro lado) es España, para ochenta países en todo el mundo (incluyendo la totalidad de África, menos el reino de Marruecos obviamente), es un Estado soberano. Desde el punto de vista del Derecho Internacional tiene todos los elementos para ser considerado así: gobierno, territorio, identidad y cultura propios,  y población permanente.

En el último informe del Secretario General de las Naciones Unidas sobre el Sahara Occidental, se exhorta a dotar a la misión de paz en el Sahara (MINURSO) de facultades de monitoreo de derechos humanos, una deuda pendiente en virtud del colonialista veto francés. Prestigiosas e incuestionables ética y políticamente Organizaciones No Gubernamentales han dado pruebas más que evidentes de la gravedad sobre la violación de los derechos contra los saharauis.

En el caso del Sahara Occidental  – un Estado sometido al régimen de ocupación militar –, el Derecho Internacional es contundente. La Corte Internacional de Justicia fue clara en su histórico dictamen de 1975. El pueblo saharaui es el único titular del derecho a elegir su destino.

¿Qué es el reconocimiento del Estado saharaui, sino que la condena de lo mejor de la civilización planetaria contra la ilegalidad internacional de la invasión mauritano – marroquí de 1975? Ello comporta nuestra conducta, el conocimiento, la acción y el respeto de acuerdo a las mejores tradiciones del humanismo.

Porque somos amantes de la libertad y la justicia estamos aquí.  Porque somos chilenas y chilenos que sufrimos una dictadura feroz digitada por los mismos poderes que hoy quieren destruir a una comunidad entera que resiste heroicamente en el noreste africano, sobre el desierto duro e implacable, los embates sangrientos de una monarquía tutelada por los intereses del imperialismo norteamericano, el colonialismo francés, y el Estado sionista de Israel, que sólo hace unos días asesinó a un ministro de la Palestina ocupada.

Porque también nosotros somos pueblo, mayoría explotada, indígenas de pupila ardiente, humanidad que sabe que su lucha no termina en sus extremidades, ni en sus fronteras estrechas.

Por eso hoy, 11 de diciembre de 2014, junto a la población saharaui que sobrevive en campamentos y carpas bajo el sol inclemente, dividido por el muro minado y armado bélicamente más extenso del planeta, víctima de la diáspora obligada por la fuerza y nunca por la razón, decimos como un solo empeño: Que tiemble la injusticia cuando luchan los que no tienen nada que perder.

Comité de Amistad Chileno con el Pueblo Saharaui

miércoles, 3 de diciembre de 2014

Chile: Estudiantes de Danza de privada Escuela Moderna cumplen una semana en paro

Ante las demandas de los jóvenes, la rectora de la institución, Vivien Wurman, se limitó a sentenciar que “aquellos que no puedan pagar, se matriculen en otro lado”.

Andrés Figueroa Cornejo  

Desde el 26 de noviembre de 2014 la totalidad de las y los estudiantes de la carrera de Danza de la privada Escuela Moderna resolvieron paralizar sus actividades académicas ante el arbitrario incremento del arancel de los dueños de la casa de estudios superiores.

Al respecto, la delegada estudiantil Linda Muñoz de tercer año informó que “sin previo aviso y justo cuando estamos finalizando el semestre, las autoridades nos subieron el costo de la carrera  en $360 mil pesos anuales (USD600) para el 2015. Si se implementa el aumento, muchos compañeros y yo misma, tendremos que abandonar nuestros estudios”.

Pero no sólo se trata de un reajuste unilateral del arancel. Las y los jóvenes están exigiendo a la rectora de la Escuela, Vivien Wurman “una enfermería que cumpla con las condiciones básicas y con profesionales adecuados dada la naturaleza de nuestros estudios. Tampoco existe la infraestructura suficiente, ni la calidad de los baños, camarines y duchas”, añade Linda, “y no contamos con un casino que dé a vasto con la cantidad de estudiantes que somos. Apenas hay una cafetería y en un espacio que, al funcionar como centro cultural, congrega frecuentemente público externo que termina por saturar las dependencias. De hecho, colamos en la misma entrada de la institución y sentados en el suelo”.

De acuerdo a los jóvenes, el precio del arancel y la matrícula no se condice con las prestaciones ofrecidas.

La carrera de Danza de la Escuela Moderna está situada en pleno Barrio Bellavista, en el centro de Santiago de Chile, y tiene 7 años de vida.

En medio de la huelga estudiantil, los jóvenes sostuvieron una reunión con la rectora Wurman, la cual, ante sus demandas, se limitó  a sentenciar que “aquellos que no puedan pagar, se matriculen en otro lado”.

A lo anterior se agrega que los estudiantes carecen de un sistema de pago de la Junta Nacional Escolar de Auxilio y Becas (Junaeb) para alimentarse correctamente, faltan aulas para los ensayos y no hay salas acondicionadas para el dictado de las asignaturas teóricas.

Linda Muñoz señaló que “nosotros trabajamos con nuestro cuerpo. Arriesgar nuestra salud significa arriesgar nuestro futuro profesional”.

La Escuela Moderna pertenece a la transnacional norteamericana de la enseñanza superior Laureate International University, la cual está asentada en 29 países de todo el planeta. Sólo en Chile, la mutinacional posee los institutos profesionales IEDE, AIEP, y las universidades privadas Andrés Bello, de Las Américas y  de Viña del Mar.

Los estudiantes de Danza dijeron que resulta “evidente el afán de lucro de la Escuela. Por eso nos obligan a documentar con cheques y/o letras el monto del crédito aval del Estado que luego debe ser cancelado al sistema financiero privado”.

Contacto: Linda Muñoz, Cel 5667 0023, y Paola Escobar, Cel 6272 0229
Dirección: Chucre Manzur s/n, a metros de la casa “La Chascona” de Pablo Neruda, en el Barrio Bellavista de Santiago de Chile.