miércoles, 30 de abril de 2008

Chile: denuncia confederación de sindicatos bancarios de chile

“CAJA VECINA” DE BANCOESTADO ATENTA CONTRA EMPLEADOS BANCARIOS


Una dura crítica realizó el Directorio Nacional de la Confederación de Sindicatos Bancarios de Chile, a la iniciativa del BancoEstado llamada “Caja Vecina”, que si bien comenzó de manera piloto el 2006, pretende extenderse a 2500 localizaciones durante este año.
Profusamente publicitada por los medios de comunicación, la “Caja Vecina”, mediante un dispositivo POS, instalado en almacenes de barrio y comercio local, promueve transacciones financieras en línea con el Banco, permitiendo la realización de giros, pago de cuentas de servicio, pago de créditos de consumo y pago de cuotas de crédito hipotecario.
De acuerdo al Secretario General de la Confederación de Trabajadores Bancarios, Luis Mesina, “este conjunto de servicios es privativo de las empresas bancarias establecidas y gestionado por medio de los empleados tradicionalmente dispuestos para ello.”
La externalización de funciones propias de los trabajadores financieros y las instituciones bancarias, contraviene la Ley General de Bancos y Orgánica del Banco Central que señala en su artículo 39 que “Ninguna persona natural o jurídica que no hubiera sido autorizada para ello por otra ley, podrá dedicarse a giro que, en conformidad a la presente, corresponda a las empresas bancarias, y, en especial, a captar o recibir en forma habitual dinero del público”, y en otra parte del mismo articulado dice que “Se presume que una persona natural o jurídica ha infringido lo dispuesto en este artículo cuando tenga un local u oficina en el que, de cualquier manera, se invite al público a llevar dinero a cualquier título o al cual se haga publicidad por cualquier medio con el mismo objeto”.
El dirigente bancario, Luis Mesina, indicó que “nos preocupa sobremanera las consecuencias que una medida de esta naturaleza tendrá contra los empleados del propio BancoEstado. En un momento histórico, donde amplios sectores de trabajadores están poniendo en cuestión la nefasta estrategia del subcontrato, la flexibilidad laboral y la externalización de funciones -todas ellas, atentatorias contra el empleo, el salario y la estabilidad laboral-, nos resulta un despropósito impresentable que el Banco que contiene los recursos del conjunto de la nación, cuenta con la confianza histórica de toda la ciudadanía, y sus objetivos originales y finales están relacionados al desarrollo de Chile, en todos sus ámbitos, hoy se aventure en un proyecto que no guarda vínculo alguno con sus horizontes de sentido.”
Con el fin de enfrentar multidimendionalmente las medidas provenientes de la dirección máxima del BancoEstado, la Confederación de Trabajadores Bancarios actualmente está gestionando una reunión urgente con el Sindicato Nacional de Trabajadores de BancoEstado, y además ha exigido el pronunciamiento, ajustado a la legislación vigente, de la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras y el Parlamento.


Andrés Figueroa Cornejo
Miembro del Polo de Trabajador@s por el Socialismo
Abril 30 de 2008

viernes, 25 de abril de 2008

Chile:"nos declaramos antiimperialista y anticapitalista"

Angélica Carvallo Prenafeta, Presidenta de la Confederación de Sindicatos de la Empresa Privada de Chile, CEPCH:

Angélica fue militante activa del pueblo en lucha contra la tiranía capitalista del General Augusto Pinochet. Angélica Carvallo fue ardiente colaboradora de la Resistencia Popular durante la dictadura. Angélica Carvallo Prenafeta, en 1988, formó núcleos de pueblo por el “No” en el plebiscito, cuyo resultado desembocaría en el comienzo de los gobiernos de la Concertación de Partidos por la Democracia, fórmula hasta hoy, gobernante en Chile.
Desde 1989 y 1991, lideró la Central Unitaria de Trabajadores en las particiones correspondientes a Santiago y Estación Central, llegando a organizar a alrededor de 80 mil trabajadores. Luego esas afiliaciones se perderían ante la llegada a la presidencia de la CUT de la Democracia Cristiana.
Angélica, ex militante del Partido Comunista, y una de las pocas mujeres con altos cargos dirigenciales en el mundo sindical, en la actualidad, y desde 1991 (elegida cada 2 años), es la Presidenta de la Confederación de Sindicatos de la Empresa Privada de Chile que agrupa a cerca de 9 mil asociados.
Es clara, llana, hermosa y de una franqueza que se agradece. Dice por los ojos y habla con el corazón bien puesto en la cabeza. En fin, “pensar, es altamente femenino”.


¿Cuál será la participación de la Confederación durante la conmemoración del próximo Primero de Mayo, en un contexto de alza en las luchas sociales?

“La CEPCH hará una marcha que se introducirá en la concentración convocada por la CUT, pero realizará su propio itinerario. En el momento que empiece a hablar el presidente de la CUT, Arturo Martínez -que para nosotros representa, entre otras cosas, la corrupción sindical- nosotros nos vamos a dar la vuelta y nos retiraremos del acto. Será una manera de repudiar, tanto a las autoridades gubernamentales que estén presentes, como a Martínez. Luego finalizaremos con una actividad en el frontis del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Diego Portales, en calle Carrera, compartiendo con los trabajadores y dirigentes de base. Durante la marcha tradicional de la CUT, nosotros vamos a caminar claramente identificados como miembros de la CEPCH, junto a otras organizaciones sindicales y sociales hermanas.”

¿Por qué la disconformidad?

“La protesta es contra la mayoría del Directorio de la CUT, salvo honrosas excepciones. A nuestro juicio la CUT es un brazo del Gobierno; un estamento que necesita el sistema dominante para justificar la supuesta democracia “participativa” que se vive en el país.”

Tú has hablado de corrupción en la CUT…

“Se grafica en los grandes montos de dinero que recibe del gobierno central. Es conocido que la CUT ingresó al concierto de las “mesas de diálogo”, cuyos fondos originalmente estaban destinados a los sindicatos para capacitación, por ejemplo. Estos fondos estaban supeditados a que la organización debía asociarse a una ONG (Organización No Gubernamental), con el fin también, de salvar alas ONG’s. Entonces al movimiento sindical le llegaba un 50 % del 100 % de los fondos. Y después esto varió escandalosamente, en el sentido de que estas platas fueron a parar a las famosas “mesas de diálogo”. El 60 % de esos recursos va a dar a la CUT, y ella lo invierte en las organizaciones que les son más leales. Como en toda agrupación sindical, los responsables de las platas son el presidente y el tesorero.”

¿Cómo defines las mesas de diálogo propiciadas por el gobierno?

“Las “mesas de diálogo” sólo son entelequias para ilustrar una supuesta “democracia participativa”. Hasta el momento, esos encuentros con empresarios no han arrojado ninguna acción concreta que signifique un avance para el mundo del trabajo. Ninguna.”

¿Qué diferencias adviertes entre la figura de Clotario Blest, fundador de la Central Única de Trabajadores, y Arturo Martínez?

“Hay una distancia sideral. Clotario Blest tenía un auténtico compromiso con los trabajadores, una consecuencia total y que llegó hasta el final de su vida. Sin embargo, Arturo Martínez lo pudo haber tenido alguna vez, pero lo perdió hace mucho tiempo. Martínez tiene un compromiso mucho más fuerte con el gobierno y tiene una gran cercanía al mundo empresarial. Por lo tanto, hay una diferencia fundamental. De hecho, la admirable vida austera de Clotario Blest no tiene nada que ver con la que llevan muchos dirigentes de la CUT actual.”

LA CEPCH Y SUS POTENCIAS

¿Quiénes conforman la Confederación de Trabajadores de la Empresa Privada de Chile?

“LA CEPCH, recientemente, cumplió 60 años. Desde sus inicios, fue una organización de composición diversa. Por eso, yo creo que la CEPCH tiene una posibilidad de crecimiento ilimitada, considerando, además, que el 90 % de los trabajadores chilenos no está organizado. A nosotros no nos interesa disputarle sindicatos a otras multisindicales, sino organizar a los trabajadores que aún no lo están.”

¿Hay algún problema transversal que afecte al conjunto de los sindicatos asociados a la CEPCH?

“La persecución sindical es un denominador común de todos nuestras organizaciones asociadas. La negociaciones colectivas son altamente conflictivas, y terminan normalmente en huelgas.”

¿Qué trabajadores agrupan?

“Están con nosotros los sindicatos de artistas del Teatro Municipal de Santiago (el más importante de Chile), sectores de trabajadores de universidades como la Diego Portales y Andrés Bello; sectores del aseo industrial, comercio, agrícola, etc.”

UN GOBIERNO SIN TRABAJADORES

¿Cómo evalúas las políticas de la Concertación hacia el universo de los asalariados?

“Al comienzo, los gobiernos de la Concertación nos hicieron abrigar grandes expectativas con la salida, entre comillas, de Pinochet. Sin embargo, a medida que pasó el tiempo, nos hemos dado cuenta que todo se ha mantenido inalterable. Seguimos con la misma legislación anti trabajadores, las mismas normas, los mismos procedimientos. Esto se ha agudizado cada vez más, porque las contradicciones esenciales de la sociedad enfrentan los intereses de la propiedad privada (consagrada en la Constitución del 80) contra el Derecho al Trabajo, que no la está. En Chile, los derechos al trabajo y la salud sólo están garantizados en el plano del acceso, lo cual está absolutamente mediatizado por la capacidad monetaria que las personas tengan. En un país donde la propiedad privada es sacra, y donde se tiene a un Estado y a un gobierno que defiende a ultranza los postulados centrales de la derecha política. Ello ha elevado los niveles de conflictividad social a través de los años. La lucha de los trabajadores de ferrocarriles y del subcontratismo está asociada al Estado. Y el gobierno siempre ha dicho, para cautelar la propiedad privada, que en conflictos “entre privados” ellos no se meten; sin embargo, en los conflictos que involucran empresas estatales tampoco se están metiendo. Aquí uno se percata que la contradicción es de una profundidad enorme.”

LAS CONDICIONES DE LA UNIDAD

¿Qué perspectivas observas para la unidad de los trabajadores chilenos?

“Muchos pueden compartir el pensamiento de la CEPCH. El tema de la unidad no deja de ser difícil, pero no imposible. Yo veo, por ejemplo, una importante cercanía con la Confederación de Trabajadores Bancarios. Hay que potenciar la unidad por la base y sobre una plataforma de principios y objetivos comunes intranzables y que, aunque los patrones así lo quieran, todavía no han pasado de moda. Porque a nosotros nos interesa la unidad del conjunto de los trabajadores, y lo que vemos en la CUT, es la unidad por arriba, a través de acuerdos superestructurales de algunos partidos políticos.”

En la CEPCH están los trabajadores del Sindicato que publica en los kioscos El Siglo en Huelga…

“Los trabajadores de el Sindicato de El Siglo en Huelga están en la CEPCH porque nosotros no hacemos distinciones ni de color político, ni de sexo, ni religión, ni etnia. Y también porque esos trabajadores de las comunicaciones testimonian una contradicción enorme. Aquí vemos a un partido que dice representar al mundo del trabajo, a las clases populares, pero que, en la práctica, a su propia gente la trata peor que los patrones. Los hechos hablan por sí mismos.”

RUIDOS INTERNOS

Desde el año 2007, ustedes han tenido un conflicto meridianamente bullado con sindicalistas del PC…

“El conflicto con el Partido Comunista –organización avalada por la dirección de la CUT- tiene que ver con que dos organizaciones sindicales que pertenecían a la CEPCH y que responden a la conducción del PC, las cuales violentaron la normativa estatutaria de nuestra multisindical. Con el objetivo de participar en las elecciones del 7 de octubre de 2007, estas dos organizaciones pagaron las cuotas sindicales con cheques sin fondo. Eso, de acuerdo a nuestra normativa interna, los dejó fuera del proceso electoral, al igual que a otras 17 organizaciones más por las mismas razones o porque no cumplían los procedimientos. Y muchas de ellas eran adeptas al actual Directorio Nacional que me toca conducir. Luego, en pleno acto de reforma estatutaria, el 5 de octubre, gente de estas dos organizaciones irrumpieron matonescamente, con golpes; se robaron las urnas con los votos, y después destruyeron los votos. Al respecto, interpusimos una querella criminal en el Ministerio Público. Pero no contentos con lo que hicieron, el 7 de octubre, realizaron una elección paralela. Sólo esas dos organizaciones, de las 67 que forman la CEPCH. Allí nosotros, a través de una toma del Ministerio del Trabajo, logramos hablar con las autoridades, quienes nos señalaron que ellos no podían pasar por sobre el Tribunal Calificador de Elecciones. Sin embargo, de la Directora de la Inspección del Trabajo, Patricia Silva, para abajo, todos conocían lo que estaba ocurriendo, y, a pesar de eso, recibieron la nómina de dirigentes paralelos, provocando el absurdo de que existen dos directorios en una misma Confederación. Ante la situación, tomamos tres caminos. Interpusimos una querella criminal; se puso una demanda por práctica antisindical por la violación de los Estatutos; y pusimos una demanda en el Tribunal Electoral. En eso estamos. Independientemente de lo anterior, no sólo no se ha provocado el desprendimiento de ninguna organización de la CEPCH, sino que estamos viviendo un franco período de crecimiento y nuevas afiliaciones. La crisis, paradójicamente, nos ha fortalecido. Y de fondo, está nuestra perspectiva de que los partidos políticos deben estar al servicio de los trabajadores y el pueblo, y no al revés, como lo ha demostrado entender el PC.”

LA MUJER DIRIGENTA

¿Qué te parece la participación de la mujer en el sindicalismo?

“Yo creo que la participación sindical y política de la mujer en Chile continúa siendo excepcional. Globalmente, en el mundo sindical, las mujeres estamos en una evidente minoría frente a los hombres. Y las mujeres que lideran organizaciones son contadas con los dedos de una mano. El tema está ligado a la gran inserción de la mujer al mundo del trabajo. Y tiene que ver con una capacidad asociada a la mayor versatilidad, compromiso y sensibilidad de las mujeres. En un mundo de hombres, la mujer que se destaque tiene que ser harto mejor que ellos. Ahora, yo me refiero a las mujeres que ocupan cargos de autoridad como mujeres; y no a mujeres que pretenden ser hombres en sus puestos de dirigentes. Suele ocurrir que se cree que el tema de la igualdad tiene relación con desprenderse del propio género. Yo creo en la diversidad y la diferencia.”

LOS PRINCIPIOS, LA LUCHA Y LA DEMOCRACIA INTERNA

¿Qué opinión te merece la existencia en el mundo sindical del Polo de Trabajador@s por el Socialismo?

“Es una corriente absolutamente necesaria en un momento clave de reconstitución de los trabajadores y la izquierda, en torno a las vigas maestras de la independencia política de la clase asalariada y un horizonte de lucha que aspira a que gobiernen los trabajadores y el pueblo en Chile.”

Hoy ustedes, como Directorio Nacional, han elaborado una propuesta de Principios y una Plataforma de Lucha muy avanzada que está siendo debatida por sus bases, ¿De qué se trata?

“La propuesta de Declaración de Principios y Plataforma de Lucha que discuten hoy las bases de la CEPCH, también queremos que sea un aporte al debate de los trabajadores latinoamericanos. En el texto, nos declaramos antiimperialistas y anticapitalistas. Creemos en la unidad de los trabajadores por la base. Creemos que no tiene ningún sentido hacer alianzas formales por arriba. Creemos en una sociedad basada en el establecimiento de los Derechos Humanos fundamentales (educación, salud, trabajo, previsión social, vivienda, etc.). Aspiramos a una Asamblea Constituyente y que existan transformaciones estructurales de la sociedad chilena a favor de los trabajadores y el pueblo. (*)”

¿Qué rol juegan los trabajadores en las transformaciones profundas y a todo nivel que ustedes demandan?

“Los trabajadores tienen un papel central en las transformaciones sociales. Sin el protagonismo de los trabajadores, no hay cambio posible. Porque la contradicción principal de la sociedad es capital / trabajo.”

Andrés Figueroa Cornejo
Miembro del Polo de Trabajador@s por el Socialismo
Abril de 2008

(*)Propuesta de Declaración de Principios y Plataforma de la CEPCH


La CEPCH declara:

Que el régimen económico, político y social que domina el mundo en la actualidad, es el régimen capitalista en su modalidad neoliberal, que ha acentuado la concentración de la riqueza y el poder en pocas manos, tanto en el mundo como en nuestro país; que en su afán de lucro depreda sin consideración las riquezas naturales de todos los países y naciones hasta colocar al conjunto de la humanidad al borde de un desastre ecológico; que ha llevado a su extremo la explotación del hombre por el hombre, y con esto ha profundizado la división de la sociedad en clases antagónicas: explotados y explotadores. Que esta situación, sólo puede ser superada, sustituyendo al capitalismo por un régimen económico-social que termine con la propiedad privada, hasta llegar a la sociedad sin clases, en la que se asegure al hombre y a la humanidad su pleno desarrollo.
Que en su fase actual de desarrollo, donde hay un amplio predominio del capital financiero especulativo por sobre el capital productivo, caracterizado como capitalismo imperialista y que ha transformado el capitalismo en un sistema mundial de esclavización y dominación de los pueblos -incluido nuestro país y el conjunto de América Latina-, la CEPCH luchará, por la recuperación de las riquezas básicas del país y del Continente y por la liberación del dominio ejercido por las fracción del capital ligado a los grandes monopolios, tanto nacionales como, internacionales sobre el conjunto de las clases sociales de nuestro país y el mundo. Por consiguiente, desarrollará todos los esfuerzos de que sea capaz para encauzar un vigoroso movimiento por la recuperación de las riquezas básicas, por la Reforma Agraria y por la expropiación de las empresas en manos del capital extranjero, sin indemnización. Por consiguiente, la CEPCH enfatiza su carácter Internacionalista y Latinoamericanista
Que la guerra es una expresión inherente al régimen del capitalismo imperialista y que el gran capital utiliza a los Estados de las potencias imperialistas y Estados subordinados a su política dentro del entramado mundial, para imponer sus condiciones e intereses al conjunto de las naciones. Por lo tanto, la CEPCH se pronuncia enfáticamente contra la actual guerra de baja intensidad promovida por EEUU y su “Guerra contra el terrorismo” con que disfraza su lucha en contra de los pueblos. Proclama, en consecuencia, la lucha internacional de los trabajadores por la paz permanente dentro de la convivencia de todos los pueblos y sin anexiones territoriales apoyando, por consiguiente, todas las luchas por la liberación nacional.
Que los centros hegemónicos a través de sus Estados han impuesto a los pueblos acuerdos comerciales (TLC) que tienen como único fin aumentar las ganancias de sus capitales, destruyendo la industria nacional, la economía agraria, y el saqueo indiscriminado de las riquezas naturales de nuestras naciones, disminuyendo la soberanía nacional de los Estados mas débiles como el nuestro, e imponiendo condiciones de extrema explotación al trabajo. Al respecto, la CEPCH expresa su más profundo rechazo a este tipo de acuerdos comerciales.
Que Chile es un Estado multinacional y conoce, dentro desde su proceso de formación, múltiples guerras de conquista e incluso de exterminio de los pueblos originarios, arrebatándoles tanto su territorio como su cultura. Que en la actualidad este proceso de despojo continúa ahora bajo las banderas de los intereses del gran capital. Que la justa lucha de estos pueblos originarios sólo se resolverá en el marco de la lucha del pueblo y los trabajadores chilenos por una sociedad donde el capital esté al servicio del trabajo y no a la inversa. Que la CEPCH apoyará la lucha de los pueblos originarios.
Que frente al régimen capitalista, la CEPCH realizará una acción reivindicacionista enmarcada dentro de los principios y métodos que han usado históricamente los trabajadores en su lucha contra el capital y los patrones, conservando su plena independencia del empresariado, los gobiernos y sectarismos provenientes de partidos políticos. Sin embargo, la CEPCH no es una Confederación apolítica. Por el contrario, representa la conjunción de todos los sectores y capas de los trabajadores. Su acción emancipadora la desarrollará por sobre los partidos políticos, a fin de mantener su cohesión orgánica y su pluralismo interno y convocando a estos a colocarse al servicio de los intereses de los trabajadores
Que la CEPCH tiene como finalidad primordial la organización de todos los trabajadores del sector privado del país, sin distinción de credos políticos o religiosos, de nacionalidad, color, orientación sexual, sexo o edad para luchar contra la explotación del hombre, hasta llegar a una sociedad construida sobre nuevas bases sociales que aseguren un desarrollo integral del hombre y la sociedad.

Que la CEPCH, para el logro de este objetivo privilegiará la unidad Latinoamericana de los pueblos y la coordinación de los trabajadores por sobre las centrales ya existentes como la CIOLS-CMT Y FSM, centrales que se han subordinado al Capital mundial.
Igualmente, en nuestro país se impulsará la unidad sindical por la base.
Que el capitalismo neoliberal atenta contra los derechos fundamentales, y los derechos humanos, en su más plena expresión. Por ello, la CEPCH luchará por su plena vigencia en la sociedad chilena. En especial, conscientes que la dictadura militar tuvo como objetivo destruir todas las conquistas logradas durante décadas de lucha por los trabajadores, llevó una guerra sucia contra los trabajadores y el pueblo y en beneficio del gran capital, tanto externo como interno, exigirá justicia para todos los caídos en su lucha por una sociedad mas justa.
Que el burocratismo, enfermedad del sistema, se ha enquistado en las organizaciones de los trabajadores, en especial en sus Centrales. La CEPCH luchará contra esta plaga fortaleciendo la democracia de los trabajadores y todos aquellos mecanismos que le permitan atacar la corrupción, la cooptación, luchando por la transparencia, solidaridad, fraternidad y consecuencia, tanto de sus integrantes de base, como sus dirigentes
Que es deber fundamental de todos los afiliados a la CEPCH, desarrollar una acción autogestionaria en lo económico, basada en lo primordial, en las cuotas de sus afiliados, evitando con esto, la cooptación de cualquier poder que quiera apropiarse de la organización, manteniendo así la autonomía indispensable para el logro de sus objetivos, así como insistirá en el acatamiento leal y disciplinado a sus principios, métodos de lucha y resoluciones. Asimismo, el esfuerzo de dirigentes y bases para conservar la unidad interna, a fin de presentar un frente monolítico en todos los órdenes sindical y gremial de la CEPCH.

PLATAFORMA DE LUCHA

El actual marco histórico

1.-El bloque político en el poder conformado por la Alianza y la Concertación, que ha buscado en estos 17 años legitimar toda la institucionalidad impuesta por la dictadura sufre una enorme crisis política, crisis que estalla desde los inicios del cuarto gobierno de la Concertación dirigido por Bachelet. La crisis ha tenido diversas manifestaciones entre las cuales se encuentra el enorme desorden de los principales personeros de ambas coaliciones que no saben enfrentar los síntomas de una enfermedad que es más profunda que los liderazgos individuales o partidarios.
2.- Las fuerzas productivas del capitalismo chileno han encontrado su propio límite histórico. Se ha instalado una forma de capitalismo rentista y parasitario, paraíso de los capitales financieros luego del saqueo de las empresas del Estado, del saqueo del salario directo e indirecto(educación, salud y jubilaciones), del saqueo a las tierras entregadas a los campesinos, al saqueo del territorio de los pueblos originarios, al saqueo de nuestras riquezas mineras, de las riqueza de nuestros mares, ríos, y bosques, después de lo cual nos dejan/rán contaminación, hoyos y mucha miseria.
3.- Los medianos, pequeños y micro empresarios son continuamente eliminados por los grandes capitales y el capital financiero que los conducen a la quiebra tarde o temprano. Lo mismo sucede con los pequeños campesinos de la agricultura de subsistencia continuamente expropiados por las condiciones impuestas por la voracidad del gran capital.
4.-El Transantiago es una hebra más de esta política de privilegiar, con el respaldo del Estado, a los grandes capitales externos e internos en desmedro del pequeño capital que perjudica a toda la población trabajadora.
5.- La CUT, por otro lado, se ha convertido abiertamente en una agencia del gobierno con Arturo Martínez a la cabeza, respaldado por el PC y la Concertación, siguiendo las políticas de las centrales sindicales en diversas partes de América Latina y el mundo. Estamos a la espera de los acontecimientos de lo que allí ocurra de aquí a las elecciones.

Internacional

1.-.No dependencia del imperialismo
2.- No pago de la deuda externa.
3.- Por la unión de los pueblos latinoamericanos en contra del imperialismo, venga de donde venga

Nacional

1.- Por una nueva Constitución; por una Asamblea Constituyente con hegemonía de los trabajadores y el pueblo.
2.- Cese de la doctrina de seguridad nacional.
3.- Por la recuperación de nuestras riquezas básicas, cobre , pesca, agroforestales, (reforma agraria).
4.- Por la plena instauración de los Derechos Humanos, que sean la base de la nueva Constitución. Castigo a los represores del Estado terrorista de Pinochet
5.- Reestructuración del sistema de seguridad social (jubilaciones, educación, salud y vivienda).
6.- Por una calidad de vida digna para los chilenos. Por el derecho a vivir en un ambiente libre de contaminantes, por una alimentación sana, fuera los transgénicos de nuestros campos y de nuestros alimentos, por la protección de nuestros ecosistemas.
7.- Porque el derecho al trabajo tenga rango constitucional. Por una nueva relación capital / trabajo reglamentada por un nuevo Código Laboral.
8.- Fin a todo tipo de discriminación cualquiera sea su origen racial, sexual, étnico cultural, etario, etc.

De los trabajadores.-

Plataforma mínima de lucha.-

1.-Por un salario mínimo igual a la canasta familiar de $ 350.000 pesos.
2.-Trabajo para todos.
3.-Seguro universal al cesante que le alcance para sus necesidades fundamentales.
4.- Un plan nacional de construcción de viviendas bajo control obrero y de los sin casa.
5.-Contra las alzas de la luz, el agua y la movilización. Aumento de salarios.
6.-Dentro del actual sistema de AFP, que obviamente no compartimos:
a) Fin a la declaración y no pago de las cotizaciones previsionales de propiedad de los trabajadores.
b) Fin a la morosidad del sistema.
c) No a la jubilación de la mujer a los sesenta y cinco años.
d) Término de las comisiones que cobran las AFP que, sin duda, son regresivas en el tiempo, impactando fuertemente a las jubilaciones de los trabajadores de más bajos ingresos.
e) Que el hombre herede pensión de su mujer.
f) Terminar con la inversión de los fondos de todos los chilenos en el circuito mundial del capital especulativo y que producto de la crisis mundial ha hecho perder hasta la fecha millones de dólares al fondo de pensiones de los trabajadores. Exigir del gobierno de turno, que estos fondos sirvan para financiar proyectos de desarrollo nacional que entreguen trabajo a la fuerza laboral chilena, dado que los fondos son dineros de los propios trabajadores.
g) La jubilación es un derecho. La CEPCH enfatiza que la acción de los trabajadores debe ir orientada al logro de poner fin al lucro empresarial con estos derechos de los trabajadores y lograr un sistema tripartito donde halla aportes del Estado, los empresarios y los trabajadores, y que la proporción aportada por los empresarios sea mayor que la del trabajador.
7.- En el ámbito de la salud:
a) Un sistema estatal eficiente para todos; la salud privada para quienes puedan pagar.
b) Fin a la discriminación llamada “del útero” (planes más caros para las mujeres en edad fértil).
c) Iguales beneficios para el sector público y privado.
d) Rechazo a la subida de los planes de las Isapres.
e) La salud es un derecho. Por ello la CEPCH orientara su acción a terminar con el lucro empresarial y transformar el sistema impuesto en dictadura, por un sistema estatal de salud de calidad para el conjunto de los chilenos.

El movimiento sindical

1.-Negociación colectiva sectorial o en su defecto por grupo económico.
2.-Impulsar la sindicalización del 90% de los trabajadores que no se encuentran organizados.

De los Derechos Humanos.

1.-. Anulación de la Ley de Amnistía.
2.-No a la criminalización de la protesta social, basta de persecución.
3.-Amnistía y/o desprocesamiento para los luchadores procesados. Libertad a todos los presos políticos. No al procesamiento por la ley antiterrorista. Derogación de esta ley. Libertad a los presos mapuche. Derogación de la ley penal juvenil
4.-Defensa de la legitimidad de todos los métodos de lucha de los explotados.

De la Vivienda

1.-Basta de trabajo subcontratado en la construcción y en las obras públicas, contratación de compañeros con salario equivalente a la canasta familiar de $ 350.000 pesos.
2.-Ningún desalojo y remates de las viviendas.
3.- Condonación de las deudas hipotecarias.

De la educación

1.- La educación es un derecho inalienable de los pueblos.
1.- No a la LGE. Fuera el lucro de la educación.
2.- Educación gratuita a cargo del Estado, en todos sus niveles.

De la Cultura

1.-Aumento del presupuesto de cultura y educación bajo control de los trabajadores.
2.- Espacios públicos para los grupos de música y bandas y demás actividades culturales garantizadas por el Estado bajo control de los artistas y trabajadores.
3.- Apoyo del Estado a los medios de comunicación independientes y del pueblo

De la Mujer

1.- Jubilación para la ama de casa a cargo del Estado.
2.-Igual salario para el hombre y la mujer para el mismo trabajo o cargo. Igualdad de oportunidades.
3.-Por los derechos sexuales y reproductivos: anticonceptivos gratuitos para no abortar, aborto legal y gratuito para no morir. Implementación de los tratamientos de fertilidad en el sistema Fonasa y sistema privado.
4.-Jardines infantiles en los barrios, lugares de trabajo y estudio.
5.-Educación sexual para los niños, niñas y la juventud bajo control de las organizaciones de la mujer.
6.- No a la discriminación sexual. Derecho a la libre elección de la sexualidad. Derecho a decidir sobre nuestro propio cuerpo.
7.-Frente al maltrato de la mujer y sus niños planteamos:
a.-Organizar a las mujeres en contra de la violencia estatal, patronal y doméstica.
b.-Intervenir colectivamente y masivamente ante la menor denuncia de violencia.
c.-Frenar los actos de violencia física con toda la fuerza de una acción organizada.
d.-Llevar por la fuerza a los violentos ante los jueces, colectivamente, hasta que queden detenidos y la seguridad de las mujeres agredidas asegurada. Por casas de refugio para las mujeres agredidas a cargo del Estado, así como su manutención.

Si nosotros somos portadores de un sueño, un ideal, debemos crear y recrear la identidad del movimiento; reconocer ámbitos del pasado y nuevos aspectos de los tiempos actuales; ser solidarios, sentirnos hermanos de una causa; tener respeto por cada persona; desterrar los dobleces; ser coherentes y consecuentes, y cumplir con lo que pensamos y creemos.

CONFEDERACIÓN DE SINDICATOS DE LA
EMPRESA PRIVADA DE CHILE

martes, 22 de abril de 2008

Chile:el loco, la `pìldora, el cobre y la victoria del pueblo paraguayo

1. El 18 de abril, un indigente con trastornos mentales prendió fuego a una estatua de la Virgen del Carmen en la Catedral de Santiago. Es la misma figura a la que Pinochet rindió sendos homenajes cuando se salvó de una acción de ajusticiamiento por parte de un destacamento del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, en septiembre de 1986, en plena dictadura militar. La oficialidad del Ejército chileno llama a la imagen de madera “La patrona de Chile”, cuando, en realidad, es la patrona de los patrones de Chile. Inmediatamente, la prensa integrista, digitada por los intereses de la clase dominante y los sectores más reaccionarios de la Iglesia Católica , pusieron el grito en el cielo, y convirtieron la conducta de un hombre que vive en la calle, se alimenta de la mendicidad y es víctima de severos desórdenes mentales, en un ataque al “alma nacional”. El hecho –insignificante en sus alcances- fue convertido en noticia, gatillando, una vez más, la irracionalidad y la ignorancia de un sector del pueblo católico a estatura axiológica incuestionable.
Textos evacuados por un médico argentino –Horacio Boló- señalan que en la Edad Media a los locos se les consideraba poseídos por el diablo, que estaban embrujados y que muchas veces se les quemaba en la hoguera. Según el francés Michel Foucault, los locos, en esa misma época, también eran portadores, a ojos de la comunidad, de poderes fantásticos y sus dichos eran consideradas alucinaciones con rangos de autoridad. En el Chile popular se dice que los borrachos, los niños y los locos, siempre dicen la verdad.
A millones de años luz de la sensibilidad profunda de los cristianos que asocian la vida de Jesús al amor al prójimo y a la emancipación de los pobres; los ricos iconografican a través de la religión sus glorias de clase, multiplicando la superstición y blindando sus lógicas de poder con una fe que confina a las clases subalternas al conformismo, la resignación y la espera de un mejor mundo después de la muerte, naturalmente. En nombre de Dios, los conquistadores hispanos y luego la oligarquía chilena construyeron un orden estructuralmente injusto y funcional a sus apetitos sin límites.
Premoderna, parte del alto clero de la Iglesia Católica chilena, no escatima oportunidad para retornarnos a la oscuridad más primitiva de la Edad Media. No es casual, entonces, que tuviera que ser un “loco” el que cometiera semejante sacrilegio. La interpretación de la quema de la Virgen del Carmen ofende la inteligencia y recrea, casi surrealistamente, un mundo y un Chile, donde el Dios de los poderosos convive tranquilamente con un capitalismo a ultranza. Por abajo, explotan sin medida, y por arriba nos castigan con los horrores del infierno. Combinación que ofende a la inteligencia, pero que funciona todavía.

Dura es la pelea popular por revertir el fallo del Tribunal Constitucional –un puñado de personajes ultra derechistas elegidos por nadie- respecto de su determinación de declarar inconstitucionales las Normas Nacionales de Regulación de la Fertilidad , originada en un recurso solicitado por parlamentarios archi conservadores (por ellos que todavía el amor se hiciera con la luz apagada y sólo con fines reproductivos). Según los diputados dinosáuricos, desde el añoso dispositivo intrauterino (“T” de cobre) hasta la Píldora Anticonceptiva de Emergencia distribuida en los consultorios de salud públicos, “avalarían métodos abortivos”. De hacerse efectiva la medida, casi tres millones y medio de mujeres se verían perjudicadas. De acuerdo a investigaciones realizadas por la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, al prohibirse los métodos anticonceptivos, la tasa de abortos podría alcanzar la cifra de 275 mil al año, superando la cantidad de nacimientos. Un aspecto relevante, tiene que ver con que, de todas maneras, las mujeres que cuenten con los recursos suficientes igual podrán suministrarse los medicamentos anticonceptivos y hacerse abortos con los resguardos necesarios en las clínicas semi clandestinas que realizan esta práctica. En los hechos, son las mujeres pobres las que sufrirían, una vez más, los delirios medievales de un grupo ultra conservador que es capaz de tomar decisiones por millones de personas. Es decir, hasta el placer humano más básico sería monopolio de quienes tienen con qué pagar. La Iglesia patronal, por su parte y como era de esperar, ha tomado partido por la determinación del Tribunal Constitucional. Pero ya han comenzado las movilizaciones de mujeres y hombres contra la medida. Lo importante aquí, es revelar el carácter de clase del contexto de producción de la decisión, y a quiénes, efectivamente, afectará. La minoría privilegiada continuará empleando los métodos anticonceptivos o el aborto (en Chile o en el extranjero) para controlar su natalidad. Mientras, la mayoría pobre –condenada a multiplicarse para dotar de mano de obra barata a un modelo de explotación de un país con cada vez menos juventud y que envejece rápidamente- es la mandatada a rechazar el fallo constitucional. La peor de las derechas (si existe alguna menos siniestra) extiende sus fueros y predominio, ya no sólo en el Poder Legislativo, sino que avanza en el Poder Judicial y ahora, en el Tribunal Constitucional. La Concertación muerde su impotencia relativa, y las tareas de la izquierda anticapitalista demandan su veloz recomposición.

En 1971, bajo el gobierno de Salvador Allende, el Congreso, por unanimidad aprobó la Ley de Nacionalización del Cobre. Durante la dictadura pinochetista y los gobiernos civiles de la Concertación su proceso de venta y privatización al capital monopólico transnacional –atentatorio a los intereses de las grandes mayorías- ha jibarizado la propiedad estatal a un simbólico 30 %, y menos. La actual Corporación Nacional del Cobre (CODELCO) ha declarado que enajenará el 49 % del nuevo yacimiento Gabriela Mistral a capitales chinos (Minmetals), uno de los más importantes importadores de cobre nacional. Junto con la venta de la mina que lleva el nombre de la primera Premio Nobel de Literatura chilena, CODELCO ya vendió por adelantado parte de su producción, a cambio de 550 millones de dólares, de los cuales 55 millones de dólares, engordarán las cuentas de las Fuerzas Armadas de acuerdo a la tiránica Ley Reservada del Cobre. A contracorriente del conjunto de gobiernos pro populares del Continente (y de países europeos, y la propia Rusia post soviética), el gobierno chileno aplica a rajatabla las políticas del neo capitalismo más ortodoxo y antipopular, y persevera en las privatizaciones de los recursos estratégicos.
Sin embargo, y afortunadamente, la Federación de Trabajadores del Cobre ya ha manifestado su oposición y ha amenazado con paralizar sus faenas de materializarse la transacción comercial. Ahora, sería una obligación decisiva para el conjunto de los trabajadores y el pueblo, que los trabajadores de planta de CODELCO conjuntaran su eventual lucha con los sectores subcontratistas del mineral rojo en orden a levantar como plataforma única la renacionalización de los yacimiento cupreros, saltando los intereses corporativos, aunando fuerzas, y convocando a la comunidad nacional a movilizarse masivamente por una demanda histórica y extraordinariamente sensible. Por el presente y el porvenir. Por justicia y necesidad. Por el decoro y las posibilidades de desarrollo de Chile.

4. En octubre de 2007, Martín Almada, Premio Nobel de la Paz Alternativo , paraguayo de estatura humana incuestionable y luchador inagotable por los Derechos Humanos, me dijo en una entrevista en Chile que “Paraguay es el país que tiene mayor energía y electricidad en América Latina. Pero los pobres cocinan a leña porque la electricidad es cara. Ahora tenemos un candidato,
Fernando Lugo, que simpatiza con Chávez, Evo y Rafael Correa. Nosotros tenemos elecciones el 2008 y se presentará este candidato presidencial que simpatiza con el socialismo del siglo 21. Pero ya vemos a la diplomacia norteamericana, al Nuncio Apostólico y la burguesía en contra. Lo bueno es que estamos perdiendo el miedo. Eso lo siento en Chile, el año pasado con la reacción estudiantil y ahora con la movilización de los trabajadores. Y ello para nosotros es un ejemplo en el país espejo del neoliberalismo. En Paraguay ya no podemos confiar en los políticos tradicionales. Nosotros debemos hacer nuestra propia administración". Me imagino su hermandad sonriente con los de abajo y su rostro endurecido contra los poderosos. Y me imagino su alegría extraterrestre ante la victoria presidencial del pasado 20 de abril del ex obispo paraguayo, Fernando Lugo, quien obtuvo más del 40 % de las preferencias, en la fórmula política del Partido Alianza Patriótica para el Cambio. Después de 61 años de gobierno del burgués, corrupto y criminal Partido Colorado, Fernando Lugo, hijo del Cristo popular, militante declarado de la Teología de la Liberación , se hace del Ejecutivo. Y si bien, la tarea recién está en la cubierta del gran libro de la emancipación de los trabajadores y el Pueblo, la victoria electoral de Lugo arroja un nuevo haz de esperanza para la Patria Grande. Al respecto, y a la luz de los acontecimientos que han ocurrido en Venezuela, Bolivia y Ecuador, es posible aventurar la agudización de la política imperialista para la Región , cuyos satélites nucleares se encuentran en Colombia, México y Chile, en distintas proporciones. Ahora bien, una cosa es ganar el Ejecutivo –como ocurriera con Salvador Allende- y otra, lograr la materialización coherente y plena de una sociedad de nuevo tipo, una que firmemente capitaneada por el pueblo blindado orgánica y políticamente, camine, pese a todas las dificultades, hacia la hegemonía de los trabajadores, obreros, campesinos y pobres. Y cuya aspiración estratégica esté asociada a resolver las contradicciones fundamentales del capitalismo; es decir, el fin de un sistema complejo donde la producción social y colectiva de la riqueza fundamenta los privilegios de una minoría; que los antagonismo provenientes de la relación conflictiva entre capital y trabajo se sinteticen a favor del segundo; y que las injusticias estructurales que produce una sociedad de clases sean la prehistoria del futuro latinoamericano. Las maneras serán, a la usanza de José Carlos Mariátegui (el coloso peruano), “creación heroica” y no llevan otro signo que la edificación del socialismo continental, la solidaridad internacionalista, el poder popular y la lucha antiimperialista. Paraguay, sin duda, luce hoy, la memoria y el porvenir de nuestras esperanzas.

Andrés Figueroa Cornejo
Miembro del Polo de Trabajador@s por el Socialismo
Abril de 2008

viernes, 18 de abril de 2008

Chile:trabajadores de sindicato banco RIPLEY aprueban huelga

Más de un 90 % de los trabajadores del Sindicato Banco Ripley aprobó la huelga durante las últimas horas del 15 de abril, debido a que la oferta final de la Administración está muy lejos de las demandas sindicales.

El retail Banco Ripley es propiedad de la comercial transnacional perteneciente al Grupo Calderón Corp., una de las agrupaciones empresariales asociadas al negocio de las tiendas comerciales y el retail más poderosas de Chile, cuyos capitales y entidades ya están en Perú y Argentina.

Un porcentaje de los funcionarios bancarios obtiene como sueldo base alrededor de $ 151.900 pesos (menos de 300 dólares y un poco más del salario mínimo, en un país donde el kilo de pan alcanza los 2 dólares y un arriendo habitacional promedio, 200 dólares). Los empleados pertenecientes al Sindicato Nacional de Trabajadores Empresa Banco Ripley exigen mejoramientos en las condiciones laborales, y un salario base de $ 260.000 mil pesos (500 dólares). Incluso, para poder llegar a un acuerdo, los trabajadores han flexibilizado ese monto.

Hasta el momento, la empresa ha ofertado una fórmula de salarios y montos que no se condice en absoluto con las reivindicaciones de los funcionarios bancarios. Es por ello que, cumplido los plazos legales, decidieron votar la huelga. Desde el 15 de abril, existen 48 horas para hacer efectiva la huelga, después de ese plazo se pueden solicitar los buenos oficios y con esto hay 5 días más, según establece la ley, para continuar las negociaciones y eventualmente la Administración mejore los requerimientos de los trabajadores. De no llegar a una negociación satisfactoria, se puede solicitar otros 5 días a la Inspección del Trabajo sólo con el acuerdo de ambas partes para continuar las conversaciones. Transcurrido ese lapso, los empleados pueden hacer efectiva la huelga legal.
Andrés Figueroa Cornejo
Departamento de Comunicaciones
Sindicato Nacional de Trabajadores Empresa Banco Ripley

Abril 17 de 2008

jueves, 17 de abril de 2008

Cena para financiar campaña por el salario y el trabajo


El viernes 18 de abril, a las 20:00 hrs., en el Centro Cultural "El Sindicato" (Maipú 424, esquina Compañía), el Polo de
Trabajador@s por el Socialismo -agrupación que reúne a dirigentes sindicales, trabajadores y profesionales- realizará una cena y actividad cultural con el fin de reunir fondos para financiar la Campaña: 2008: Año de la Lucha por el Salario y la Estabilidad Laboral.

En términos generales, el Polo es una organización amplia que apuesta a la unidad de los asalariados en torno a la independencia política de la clase trabajadora y un horizonte de lucha y sentido asociado al establecimiento del Socialismo en el país.

La cena tiene un valor de $ 3 mil pesos y se desarrollará en un ambiente de fraternidad, diálogo entre pares, exposiciones musicales, poesía y baile.

Polo de T
rabajador@s por el Socialismo

Abril de 2008

martes, 15 de abril de 2008

Chile: crisis econòmica, desempleo y la izquierda del partido socialista

La caída del dólar (pese a la inyección absolutamente insuficiente del Banco Central), el alza del petróleo, la crisis energética, el aumento inflacionario, el alza de los alimentos a nivel mundial, la recesión norteamericana y la desaceleración económica de los llamados “países emergentes” (China, India), en conjunto y de manera interdependiente, resultan variables que impactan dramáticamente en la plataforma económica que sustenta la arquitectura del modelo chileno, dañando sustantivamente las condiciones de existencia de los trabajadores y el pueblo.
Según cifras oficiales –que muy bien pueden ponerse en duda viniendo de interesados organismos estatales-, a la fecha y comparativamente al mismo trimestre del año anterior, la cesantía en el país ha aumentado un 1 %. Mientras el Ministro de Hacienda, Andrés Velasco, hace gárgaras teatrales para intentar imponer un discurso de tranquilidad para los inversionistas extranjeros y los bolsillos nacionales, lo cierto es que el costo de la vida ha crecido más de un 8 %, número que provoca su altura en virtud del aumento del precio de los alimentos esenciales y servicios básicos. Es decir, lo que sube son las mercancías estratégicas, y lo que baja son las zapatillas chinas para después del baño.
Más allá del superávit multimillonario -cuyas migajas el gobierno ha convertido en un bono miseria por una vez para “paliar las alzas” ($ 20 mil pesos, menos de 45 dólares) para el 40 % más pobre de la sociedad- y que, en realidad corresponde al ahorro o aval necesario ante una eventual debacle del empresariado (un Estado burgués siempre subordinará sus dinámicas económicas a los intereses y perpetuación de las clases dominantes), las desigualdades en el plano de los ingresos campea de manera estructural; construye las condiciones de una nueva crisis social; y apura la reorganización de los trabajadores y el pueblo.

Parte de las reacciones del gobierno concertacionista para enfrentar la desaceleración económica chilena, están asociadas a controlar la inflación mediante la refrigeración de los salarios. El capital, por su parte, como es histórico en estos casos, destruye trabajo. Sólo como un vistazo a los ejemplos más bullados, está el despido de 1600 trabajadores de la Industria del Salmón (una de los polos exportadores más significativos del país destinados a mercados japoneses y norteamericanos). Sólo en la empresa Marine Harvest, propiedad de capitales noruegos, el 12 de abril, 350 trabajadores que ingresaban al turno de medianoche en la planta Chinquihue de esa empresa fueron notificados de sus despidos y entregados sus finiquitos. Pese a que la medida estaba anunciada para mediados de año, la determinación patronal se adelantó sin más argumentos que los correspondientes a sus propios intereses, e ilustrados por la contaminación de cosechas salmoneras producto del virus ISA. Nuevamente, ante la solicitud de la intervención del gobierno frente a la masiva desocupación, el Ejecutivo se limitó a decir –como ya es su peregrina costumbre- que el incidente es un “conflicto entre privados”. Al respecto, el gobierno parece no percatarse que al no existir mediadores en los conflictos laborales, no sólo no cumple con una función capilar del Estado asociada al Derecho al Trabajo, sino que, paulatinamente, crea las condiciones para el despliegue más directo y franco de nuevos episodios de lucha de clases. Desde abajo, la nula o insuficiente regulación estatal al menoscabo del trabajo, alberga potencias entre los asalariados que promueven la independencia política de la clase, el descrédito creciente del gobierno, y la urgencia de empuñar con mano propia la salida a sus conflictos. De algún modo, la propia obsecuencia e indolencia de la Concertación gastada, edifica un escenario lleno de posibilidades para la recostitución de la fuerza destinada históricamente a enfrentar al capital.
El 7 de abril, 520 trabajadores de Cerámicas Cordillera, legendaria productora de esos artículos, fueron notificados del cierre de la planta de producción donde laboraban. Cerámicas Cordillera nació en 1984, como una empresa destinada a la producción para el mercado interno de cerámicas de calidad. Es parte del Grupo Pizarreño, formado por Cerámicas Cordillera, Ladrillos Princesa, Duratex, Romeral, Etersol, Fibrocemento Pudahuel, Tejas Chenas y Aislantes Nacionales. El Grupo Pizarreño es un costado de la transnacional ETTEX de origen belga, y en Latinoamérica tiene presencia, además de en Chile, en Perú, Colombia, Brasil y Argentina. Pero Cerámicas Cordilleras no cierra como empresa, sólo que ahora se dedicará exclusivamente a la comercialización de cerámicos para el mercado nacional. Los trabajadores de la empresa han señalado que “la contradicción es entre capital transnacional y los trabajadores chilenos, pero esto no es mejor ni distinto cuando se trata de capitales nacionales.” Aquí, la búsqueda patronal de mano de obra y mercancías más baratas vinculadas a la producción cerámica y la mantención de las tasas de ganancia, funciona como ley de hierro del capitalismo contra los trabajadores.
Asimismo, recientemente fueron despedidos 300 trabajadores de la tienda comercial Casa Ideas, mientras la industria forestal es fuertemente golpeada por la baja de demanda norteamericana de productos madereros para la construcción, lo que ha provocado cierre de aserraderos y reducción productiva, y, por tanto, de empleo. El 2007, el producto redujo sus envíos a USA en un 40 %, pasando de 320 millones de dólares en 2006 a 189 millones de dólares en 2007. En los dos primeros meses de 2008 ya se hunde un 15 % por debajo de lo vendido el mismo bimestre de 2007. En este caso, las exportaciones derrumbadas y sus fuerzas productivas asociadas, tiene directa relación con la crisis de la vivienda norteamericana que frenó de golpe la construcción habitacional para los segmentos “de alto riesgo” de la principal economía mundial.
Para efectos de este artículo, sólo vale mencionar la debacle de la producción nacional ligada al calzado y el textil, debido a las importaciones asiáticas a muy bajo precio. Lo que China compra de cobre chileno, engordando la cuenta fiscal ante eventuales crisis burguesas, por otro lado, lo cobra con creces a través de sus importaciones destructoras de trabajo chileno. No es extraño, entonces, que más del 70 % de los asalariados del país se desempeñen en áreas de servicio. En Chile, todo el mundo vende algo, pero muy pocos producen algo.
En resumen, la crisis de dimensiones insospechadas del capital mundializado impacta a diario de manera negativa frente al salario, la estabilidad laboral, e implacablemente en el empleo. Y todo lo que haga el gobierno –cuyo contenido político económico es similar al de la derecha histórica- tendrá el efecto de una aspirina de niños para enfrentar un cáncer maligno.


La crisis de la Concertación de Partidos por la Democracia –forma aparentemente más progresista, pero con el mismo contenido clasista del bloque en el poder- no sólo sufre el desprendimiento de los laterales más derechistas de la Democracia Cristiana y el PPD, cuyos movimientos han brindado mayoría a las políticas de la Alianza por Chile en ambas cámaras del Poder Legislativo. Ahora ocurre que, luego del Congreso Salvador Allende (!) del Partido Socialista, y en vísperas de las elecciones de la nueva directiva de esa tienda, a contrapelo de lo anterior, ha surgido el Movimiento de Acción Socialista, franja liderada por el Senador Alejandro Navarro. Su objetivo general, es representar una versión crítica al extremismo neoliberal y enfrentar la hegemonía partidaria de Camilo Escalona y el tristemente célebre, Marcelo Schilling. En su documento de Fundación, el MAS se plantea “crítico de la Mesa del Partido por su falta de capacidad para transmitirle oportunamente a la Presidenta el malestar ante políticas públicas erradas, asumiendo actitudes obsecuentes por el supuesto fantasma de nuestro rol como Partido en el gobierno de la Unidad Popular. Dirección, que con esta actitud ha respaldado la profundización de un modelo económico que afecta y rechaza la mayoría de nuestro pueblo.” Asimismo, el texto indica que “nuestro Partido… (tiene) una clara definición antiimperialista, solidaria con todas las causas que buscan afianzar la autodeterminación de los pueblos, la superación del capitalismo y la construcción del socialismo del siglo XXI.”
A lo largo de su historia, el Partido Socialista ha sido una organización de tendencias y tensiones internas, debido, entre otras causas, a su raíz pequeño burguesa, independientemente de su alta penetración en el campo popular.
Luego de casi 20 años de gobiernos concertacionistas, un segmento claramente minoritario a nivel copular del Partido Socialista, cree estar en medio de las condiciones necesarias para promover un viraje hacia la izquierda y por arriba de una de las piezas de la Concertación. Navarro, un buen republicano, progresista y amigo del gobierno venezolano y boliviano, abre un tragaluz en mitad de la opacidad y bancarrota de proyecto del Partido Socialista. ¿Ingenuidad; punto de arranque para acumular fuerzas a mediano plazo adentro y afuera del PS; plataforma mínima para acelerar una eventual candidatura presidencial; polo de atracción para la militancia de base descontenta; puente franco hacia una recomposición con la izquierda tradicional; la reedición actualizada de una visión remozada y con aspiraciones a largo plazo de una nueva Unidad Popular?
Naturalmente, el MAS perderá en las elecciones internas del PS. La descomposición política en relación a las fuentes inspiradoras del PS de Salvador Allende, es estratégica y sin retorno. Comenzó en los 80, en plena lucha contra la dictadura y digitada por el extinto eurocomunismo, y menos variará ante la hegemonía abrumadora en el sistema político –y, por cierto en el PS- en torno a la reificación del capitalismo como único modelo de sociedad posible.
La localización, visibilización y organización de una corriente auténticamente progresista al interior de uno de los partidos de la Concertación, podría funcionar –si es que cobra fuerza y no sólo es pirotecnia electoral- como intento de contención de la ultra liberal, ante la derechización explícita del conglomerado en el Ejecutivo.
Todavía es muy temprano para prever los alcances y potencias del MAS. Por lo pronto, lo importante es que colabore y no obstruya el proceso de recomposición de la organización de los trabajadores y el pueblo con independencia política de clase y horizontes auténticamente socialistas. Y es de esperar, que no intente, por arriba, lograr dividendos políticos ante el descontento popular. Ello comportaría una nueva variante demagógica, que sólo alimentaría la confusión de los de abajo. Más bien correspondería que la tendencia de Alejandro Navarro se pusiera al servicio de los intereses populares. Que dejara de mirar un momento a una Moneda hoy inaccesible, aclarara más su proyecto y denunciara, de cara a las mayorías, la corrupción, la capitulación, la descomposición política y ética que gangrena buena parte de los que gobiernan el actual Partido Socialista. Así y sólo así, los de abajo podrían observar al MAS como una propuesta seria y con grados de consecuencia auténticos.


Andrés Figueroa Cornejo
Miembro del Polo de Trabajador@s por el Socialismo
Abril de 2008

viernes, 11 de abril de 2008

Presidente de la CUT garantiza paz social al gran empresariado


En el cuerpo de Economía y Negocios de El Mercurio del viernes 11 de abril, el Presidente de los grandes empresarios y ramas económicas, gremializadas en la patronal Confederación de la Producción y el Comercio, Alfredo Ovalle, afirma lo siguiente:


-¿Fue visto en la CPC un apoyo a la reelección de Arturo Martínez en la CUT?"No, nunca ha existido un apoyo y no me corresponde. Lo que sí he logrado es crear una confianza con el presidente de la CUT, de manera que creemos que en el resto de su mandato podríamos llegar a acuerdos que van a beneficiar especialmente a los trabajadores y, por supuesto, a los empresarios, en el sentido de que exista mucha mayor paz social, que evitemos todo acto de violencia y que podamos llegar a acuerdos en materia de negociación colectiva, seguros de cesantía y de capacitación especialmente".

A buen entendedor, pocas palabras.

Andrés Figueroa Cornejo
Miembro del Polo de Trabajador@s por el Socialismo

Abril de 2008

jueves, 10 de abril de 2008

Chile: movimiento Patriòtico Mnuel Rodríguez: Hijos de la rebeldìa

Entrevista a Leandro Torchio, Coordinador del MPMR

El 7 de septiembre de 1986, en pleno auge de la lucha amplia y popular contra la dictadura militar, un destacamento del Frente Patriótico Manuel Rodríguez realizó, acaso, la acción más audaz y decidida de la historia de los de abajo en Chile: el intento de ajusticiar al General Augusto Pinochet Ugarte, responsable último de innumerables crímenes políticos de toda laya y magnitud cometidos desde el 11 de septiembre de 1973 a nombre de las clases dominantes y el imperialismo norteamericano.
Era el denominado “año decisivo” por el Partido Comunista. Desde los albores de los 80, el FPMR se constituyó en la fuerza militar de la izquierda con mayor desarrollo, crecimiento, simpatía popular e influencia en el país. El conjunto de acciones militares con el objetivo de colaborar con el derrocamiento de la dictadura pinochetista, fue, según muchos analistas, determinante a la hora de precipitar desde el Pentágono el pacto interburgués que abriría un nuevo período de gobiernos civiles, sin tocar el paradigma de acumulación capitalista de impronta neoliberal. El pánico patronal e imperial ante la maduración de condiciones de carácter insurreccional, obligó a los poderosos a deshacerse de Pinochet e imponer una democracia sin pueblo, bien atada por arriba y con votaciones generales que, hasta hoy, mantienen incólume un modelo profundamente antipopular.
Casi 22 años han pasado desde el fallido tiranicidio. Al igual que el conjunto de la izquierda anticapitalista, el FPMR ha sufrido múltiples fracturas y desprendimientos de militancia. Parte del contingente rodriguista permanece en el Partido Comunista; hacia finales de los 80 una importante escisión dio nacimiento al FPMR-Autónomo; y en 1991 nace el Movimiento Patriótico Manuel Rodríguez todavía dependiente del Partido Comunista. El 2006, el MPMR asume el camino propio, ya separado del PC.
Muchos de los mejores hijos del pueblo ofrecieron su vida en la lucha rebelde y justa contra la tiranía desde el Frente. Muchos fueron torturados, encarcelados y perseguidos. Sus nombres alumbran la memoria del arrojo generoso y resuelto del pueblo chileno en lucha.
Actualmente, Leandro Torchio es el Coordinador del Movimiento Patriótico Manuel Rodríguez. Dirigente sindical y sociólogo, fue “pionero” del Partido Comunista a los 10 años de edad. En 1980 ingresó a las Juventudes Comunistas atraído por la Política de Rebelión de Masas que implementaba esa organización y que se sintetizaba en el empleo de todas las formas de lucha contra la dictadura. En 1991 fue destacado por el PC como uno de los cuadros responsables de la formación de la dirección política del MPMR.
Mientras me cuenta que está leyendo “Marx en el Tercer Mundo” de Néstor Kohan, “Multitud” de Toni Negri y su colección sobre la historia del libertador chileno, Bernardo O’Higgins, me ofrece asiento, mientras afuera el otoño hace su trabajo en Santiago

¿Cómo del Frente se pasa al Movimiento Patriótico Manuel Rodríguez?

“El Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR) fue una creación del Partido Comunista (PC), fue parte de la Política de Rebelión de Masas (PRM). Era parte de un complejo más global que tenía que ver con la respuesta de parte de la izquierda chilena al fracaso de 1973 y a la posibilidad de la revolución. Nosotros siempre pertenecimos al FPMR del PC. El Frente sufrió una escisión en 1987 de un conjunto importante de compañeros, que se alejaron de la política del PC, y formaron una orgánica que, en términos generales, se conoció como FPMR-Autónomo. Nosotros nos mantuvimos con la PRM, que es una idea más insurreccional, de sublevación, en el terreno militar.
Entonces el PC dio una discusión respecto de cómo enfrentar el nuevo momento, y a principios de los 90, decidió adecuar su política en lo que se llamó la Revolución Democrática.
Ante eso, y junto a la caída de la Unión Soviética y al giro de la concepción de los cubanos para Latinoamérica, se planteó en el conjunto del PC qué es lo que sucedería con el rodriguismo. Esta gran adquisición del pueblo, en el sentido de que, cultural y materialmente, había logrado romper el monopolio de las armas por parte de la burguesía. Aquí se llegó a la conclusión de que el rodriguismo tenía un espacio muy importante de lucha, pero que también tenía que ajustarse al momento nuevo que vivía Chile. De esta manera, se llegó a la conclusión de que la forma de lucha que pregonaba el FPMR, lograría su adecuación en el Movimiento Patriótico Manuel Rodríguez (MPMR), el cual oficializa su nueva expresión el 31 de mayo de 1991, acompañado en un acto por el Padre José Aldunate, Andrés Aylwin, y una serie de figuras nacionales. Los objetivos son reivindicar lo hecho durante la dictadura y desarrollarse en el nuevo período. Nunca hubo ninguna intención de renunciar a los contenidos fundacionales, sino que adecuarlos. Simbólicamente, se saca el fusil de la bandera.”

¿Fue ordenado el repliegue?

“Este proceso, al igual que en el conjunto de la izquierda, se vivió seguido de un montón de contradicciones. Los cuadros, a quienes el propio PC nos había designado para esta tarea, llegábamos al nuevo desafío con distintas experiencias.”

EL BRAZO ARMADO DEL PUEBLO

El Frente jamás fue un partido…

“Dentro de nuestra concepción global, estimábamos que el Frente era una suerte de “brazo armado del pueblo”. Fue una creación del PC, pero era integrado por mucha gente que venía de la Milicias Rodriguistas, por ejemplo. Y siempre se pensó como una ayuda a la lucha multiforme del pueblo. No era la sustitución de las organizaciones sindicales, de los sin casa; era un complemento. Siempre tuvo una concepción de masas, no una de vanguardia, ni de partido político. Desde la fundación del Frente se planteó que no se nacía para disputar espacios a los partidos políticos.”

¿Cuál era la línea militar?

“Desde esa perspectiva, existían distintas miradas al interior del Frente en el terreno militar. No era simplemente un grupo armado que daba golpes, elevaba la moral, que hacía acciones de propaganda. Existía toda una línea de autodefensa de masas. Estaba la idea, también, de hacer un planteamiento a las Fuerzas Armadas para democratizarlas y cambiarlas. Se proponían los aseguramientos multilaterales desde el mundo popular; de cómo la gente defendiera sus cosas.”

En 1991 el Frente del PC, de algún modo, se desactiva respecto de cómo se había instalado en el mundo político popular…

“Los aspectos militares de la política son fundamentales: ese es una de las grandes lecciones del fracaso del 73. Entonces en nuestro proceso de adecuación, solamente se suspendía una forma de lucha, pero no se suspendía la concepción general. El objetivo es que el movimiento social se dote de una concepción global de poder; que el pueblo tiene derecho a la autodefensa y a la rebelión, ayer, hoy y siempre.”

EL GUERRILLERO DE LA LIBERTAD

¿Por qué se acude a Manuel Rodríguez para nombrar al Frente en vez de algún otro personaje de la historia?

“Manuel Rodríguez, porque él aparece en la historia de Chile como el guerrillero popular. Parte de nuestra apuesta política es que lo popular tiene que ser hegemónico en la construcción de la sociedad futura. Nosotros tenemos una enorme desconfianza de las elites, que han encabezado momentos de rebelión, pero que han terminado traicionándolas. Nosotros pretendemos que lo popular sea lo central, y Manuel Rodríguez es el héroe de nuestra independencia que representa de mejor manera lo popular, y representó, en su momento, a la PRM cuando se creó el Frente. Es decir, en el marco de un país ocupado, simbolizó la resistencia y la audacia. Porque la idea del Frente era “desordenar” para que apareciera “lo otro”. Y Manuel Rodríguez expresa la rebeldía: “Me haré la revolución a mí mismo”. Es decir, cuando no hay cambio permanente, e incluso cuando el movimiento popular esté en el poder debe tenerse muy en cuenta. Muchos movimientos revolucionarios se convierten en orden osificado, en burocracia. Por eso necesitamos un orden bullente, permanente, en renovación eterna.”

¿De qué manera la imagen del independentista Manuel Rodríguez rima con la lucha anticapitalista?

“Dentro de los aspectos militares de la política, reivindicamos la figura de Manuel Rodríguez, por la idea de lo patriótico, lo nacional y de nuestra identidad. Nosotros decimos: excelente es conocer lo que fue la Unión Soviética y otros movimientos revolucionarios, pero la esencia de nuestra lucha es la historia de resistencia de nuestro pueblo. Manuel Rodríguez, el Destacamento José Manuel Balmaceda de la V Región, el Destacamento Bernardo O’Higgins de Rancagua; el Destacamento de la VII Región Javiera Carrera, Lientur en la VIII, Leftrano en la IX, Caupolicán en la X, Luis Emilio Recabarren en la I y II regiones, Camilo Henríquez en la IV Región. Hay una historia que veníamos a recoger.”

¿Cuáles son los principios nucleares del rodriguismo?

“Los puntos centrales del Frente se resumían en dos ideas básicas: luchar por la soberanía nacional y soberanía popular. Nosotros siempre reivindicamos los dichos de Allende cuando asume el gobierno en el Estadio Nacional: “Con nosotros gana Caupolicán, Lautaro, Bernardo O’Higgins, la Sociedad de la Igualdad, Luis Emilio Recabarren…”

LA PERSPECTIVA

¿Qué papel tienen los aspectos más ideológicos de la lucha desde el MPMR?

“Nosotros no luchamos en función de una ideología, en su sentido de “ideario abstracto”. Luchamos porque nuestra historia y nuestra experiencia han sido de injusticia y rebelión. Muchos chilenos, hombre y mujeres, siempre han luchado porque cambien las cosas debido a que lo que nosotros hemos vivido es injusto y arbitrario. Son dictaduras permanentes, tanto de civiles, como de uniformados. Nuestra historia es una historia de opresión y de lucha. Así, el pueblo chileno ha ido generando expresiones maravillosas de resistencia que están olvidadas, que no hemos logrado reivindicar con fuerzas. En Chile no tenemos una memoria rebelde. Y en ese ámbito ha habido creaciones fantásticas. Creaciones que han sido influidas por movimientos parecidos que se han dado en el mundo, en Europa, en Estados Unidos, en América Latina. Esto también ha sido parte de nuestra conformación.
No renegamos de nada, pero sí queremos dejar atrás cierta influencia eurocéntrica. Porque nuestra esencia está en otra parte. Si no existiera Marx –que nos sirve y ayuda-, igual hay que pararse y luchar. Y aquí nos encontramos con la presencia anarquista, interesantísima hacia 1900, por ejemplo. En síntesis, nosotros luchamos no porque nos lo diga un libro, independientemente de que debemos integrarlo a nuestro acervo.”

¿Cuáles son los marcos teórico-prácticos del MPMR?

“Somos marxistas y bolivarianos. Nuestra lucha es anticapitalista, antiimperialista y antiburocrática. Nosotros, como MPMR, tuvimos la oportunidad de recorrer Latinoamérica y conocer distintas realidades. Nos dimos cuenta que en el Continente hay una vertiente comunista importante, pero también han existido otros caudales revolucionarios, como la Teología de la Liberación, el Nacionalismo Revolucionario, etc., con distintas fuerzas. De este modo nos fuimos encantando con esas ideas, que no eran necesariamente Hugo Chávez o “chavismo”. Entonces llegamos a reafirmar una convicción –que ya venía de Nicaragua y El Salvador- en torno a la idea de que no es posible la revolución de nuestros pueblos sin una gesta de estos tiempos, pero una gesta unitaria, como la que hubo en la Primera Independencia. Nuestras fronteras son muchas veces impuestas. Nuestra suerte va de la mano del trabajador argentino, del boliviano, del peruano, etc. Entonces creemos que nosotros debemos ser parte de esta experiencia de lucha por la emancipación y la revolución de Latinoamérica. Considerando, que tenemos una historia común, una lengua común, una religión común, migraciones comunes, familias comunes, resistencias comunes; y un enemigo al acecho en los gobiernos norteamericanos que siempre nos han considerado su patio trasero.”

¿Cuál es el lugar de América Latina y Bolívar?

“Nosotros estimamos que la emancipación de la Patria Grande es un momento necesario para llegar, en algún instante, a la revolución mundial. Hasta que no sean libres todos los seremos humanos, seguiremos siendo esclavos e infelices. Y muchos tienen esta idea: los comunistas, el Che Guevara, Artigas. Más allá de ello, pensamos que en Simón Bolívar, en la tradición bolivariana se sintentizan de mejor forma estos pensamientos. Porque Bolívar planteó la unidad latinoamericana, el antiimperialismo. Pero no adherimos a la estatua, sino a las ideas que encarnó.”

¿Qué hay de nuevo en la izquierda latinoamericana que ustedes incorporan?

“Nosotros no vamos a repetir el modelo cubano, ni el venezolano, ni el llamado socialismo histórico. Tiene que ser a la chilena, pero, al mismo tiempo, parte de este proceso continental. Nuestros objetivos finales están asociados a la liberación del hombre, a la superación de la sociedad de clases. Por eso nuestra lucha también es antiestatal. Entendemos que la revolución tendrá que pasar por momentos que necesitan una gran fuerza capaz de imponerse para defenderse de las clases dominantes. Nosotros jamás torturaríamos. Pero creemos que hay que generar los mecanismos para que exista soberanía popular y no se repita algo que ya ha sucedido en la práctica. Y que tiene que ver con el problema de la “representación”, que en muchos casos promueve la creación de una casta que se aprovecha de los beneficios que comporta la representación política. Y esto, lamentablemente, ocurre hasta en partidos de izquierda donde sigue primando la lógica burguesa. Entonces uno puede ver hasta dirigentes de izquierda que se creen patrones. Tenemos que evitar que este tipo de prácticas terminen por convertirse en una nueva forma de dominación.”

¿Cuál es el rol de una conducción revolucionaria?

“Estas ideas no suspenden la necesidad de tener una dirección. No estamos suspendiendo la vanguardia y la organicidad. Pero creemos que hay momentos y momentos. Obviamente que para defenderse hay que actuar de un modo especial; pero el resto de los momentos tiene que ser creación en conjunto. Es decir, que al final, el tema de la autoridad dentro del movimiento revolucionario sea a través del ejemplo, mediante la hegemonía, el convencimiento y no de una imposición.”

¿Qué tipo de militancia buscan?

“Nosotros apostamos a la creación de cuadros integrales, creativos, participativos; no administradores. Y esta idea se funda en una fe no ingenua en que el pueblo ha mostrado una enorme creatividad. Jamás nos dejamos de sorprender, por ejemplo, de la habilidad que tiene la mujer chilena para sobrevivir bajo este modelo. Cuando uno recurre al pueblo, las posibilidades se multiplican. De esta manera, estamos por fomentar la participación sustantiva versus la participación funcional.”

¿Qué hay de la llamada convicción de poder?

“Tenemos una alta vocación de poder. Pero no poder para nosotros, sino que para el pueblo. Sobre todo hoy que estamos viviendo la gran contradicción de que los avances científico técnicos de la humanidad podrían ponerse al servicio del conjunto, pero gobierna la barbarie. Además, nosotros tenemos el concepto de mayoría activa en desarrollo, porque para nosotros la mayoría no es un problema de plebiscitos, sino de participación.”

¿Es hoy pertinente la disyuntiva vía armada/vía electoral?

“Nosotros andamos en una búsqueda. Tenemos una noción de que nuestra línea no es la vía electoral, ni la vía armada, sino de masas, de participación popular. Del pueblo en desarrollo con nosotros dentro. Y con una concepción de poder popular. Si no empezamos a vivir la sociedad que aspiramos hoy; si no nos convertimos en este proceso, en el ser al cual aspiramos, no hay posibilidades. El tema central es cuánto poder va adquiriendo el pueblo para hacer los cambios. Más allá de la disyuntiva reforma/revolución.”

LEJOS DEL PARTIDO COMUNISTA

¿Cómo se produjo el distanciamiento con la dirección del Partido Comunista?

“En relación al Partido Comunista, el MPMR, como parte de un proceso casi natural, comenzó a cobrar una vida propia. Comenzó a elaborar, a buscar y a no depender de la cuenta política del PC. Y en el camino, con pequeñas y grandes definiciones, llegamos a la conclusión de que nuestras diferencias no eran sólo tácticas, sino que se incubaban distancias estratégicas. Una de las diferencias esenciales tiene que ver con la apreciación que se tiene de la Concertación y sobre el momento político que estamos viviendo como espacios epocales. Nosotros creemos que la Concertación es parte del mal mayor. El PC, mientras tanto, no piensa lo mismo; es crítico, pero no lo suficiente como para hacer una alianza con la Concertación. También, a nuestro juicio, el PC ha escogido construir movimiento popular al alero y en sintonía con la forma de Estado existente. Es decir, ellos piensan que lo logros del movimiento popular se van a ir reflejando en leyes. Eso habla que, según el PC, la revolución en Chile pasará nuevamente por conquistar un gobierno como el de la Unidad Popular, y eso abre una estrategia donde el movimiento social se expresaría en función de lo electoral. Aquí el mecanismo de cierto tipo de negociaciones juega un papel fundamental en la articulación de esta estrategia: negociar los votos, negociar la expresión social. Esa concepción nosotros no la compartimos. Nuestra idea es que toda nuestra construcción se convierta en poder popular. Un poder popular que no debe depender de la ley –aunque la aproveche-, que sea autogestionario y no tan dependiente del Estado; y que este desarrollo vaya acompañado de la idea de la sublevación. Lo que hemos resumido en la expresión: construir desestabilizando. Que exista un poder popular que también actúe como contrapoder. Estamos por una Asamblea Constituyente. Y creemos que con un pueblo organizado y conciente no necesitamos del clientelismo político. Nosotros pensamos que al PC le está pasando lo que a otras izquierdas, digamos, tradicionales, que dicen que el movimiento popular está en función de estructuras partidistas. Y nosotros tenemos la impresión que lo revolucionario hoy, es al revés: los partidos deben ponerse en el sentido del movimiento popular.”

¿El MPMR quiere ser un partido?

“Nosotros nos sentimos un germen de un partido revolucionario de nuevo tipo, y preferimos, incluso hablar de una fuerza revolucionaria. Puede haber partidos que tienen varios partidos en su interior. Y así, deberíamos apostar a un complejo organizacional que tenga una política general y garantice la diversidad. Yo me la imagino confluyendo. Y creo que este complejo debe sintetizarse en una política, y en una multiorgánica. Eso para el movimiento popular. Nosotros como MPMR sí seguimos pensando que los rodriguistas necesitamos una columna vertebral de cuadros ganados para cierta idea.”

EL “PODEMOS” AGOTADO

Hasta hoy, ustedes forman parte de la agrupación de izquierda “Juntos Podemos”…

“Lamentablemente, estamos llegando a la conclusión de que la idea “podemista”, como está hoy, con los actores actuales, se agotó. La idea inicial de ser alternativa clara a la Concertación, ha sido abandonada por los actores principales de esa iniciativa. Hoy hay que cerrar un ciclo. Por eso, es más necesario que nunca que aquellos que opinamos distinto a ese grueso que abandonó las ideas iniciales del Podemos, levantemos el espíritu original de ese proyecto. Teniendo presente que incluso las ideas fundacionales del Podemos hoy resultan insuficientes, debido a que el Pacto se erigió con objetivos electorales. Nuestra concepción es otra. Hoy estamos buscando lo que hemos llamado izquierda popular o red popular. Es decir buscar a todos quienes ven a la Concertación como parte fundamental del mal mayor, que hay que salir a la calle, que hay que construir rebeldía y poder popular, que use los espacios políticos y sociales con estas ideas. Entonces, estimamos que la izquierda más radical (que va a la raíz de los problemas), en otro momento de unidad –que la imaginamos con todos, incluyendo al PC- llegue con una fuerza capaz de disputar la hegemonía de las mayorías. Para esto tenemos que incentivar una nueva promoción de dirigentes y luchadores sociales que vengan a remplazar a esta elite gastada, añeja. Luego, hay que colaborar en la creación de sindicatos, organizaciones de allegados, etc. Hay que levantar un movimiento de cambio en la CUT –fuera y dentro-, un movimiento secundario que supere su enorme jornada, un movimiento universitario que supere al actual gastado, y, en otro nivel, que se supere la fragmentación popular. Nuestro sello es llegar a una asamblea nacional constituyente que actúe como poder popular.”

EL RODRIGUISMO

¿En qué condiciones se encuentra el mundo rodriguista hoy?

“Atomizado. Uno quisiera que esta fragmentación no existiera. Nosotros estamos convencidos que, en algún momento, es preciso crear el ejército revolucionario. Estamos convencidos que hay que romper el monopolio de las armas por parte de la burguesía. El pueblo necesita, con urgencia, contemplar los aspectos militares de la política porque estamos en medio de la lucha de clases. Creemos en un rodriguismo que dé cuenta de la revolución científico-técnica, de las nuevas formas de trabajo, de la guerra de cuarta generación o guerra asimétrica. De reunir la idea de participación, con la eficacia. Porque también el aparato represivo se ido perfeccionando. Esta es una lucha constante. Y necesitamos un rodriguismo en relación al movimiento popular, que deje algunas cosas que fueron útiles en un momento y hoy no sirven. Es una búsqueda, sin abandonar ni renegar de nuestro pasado. Es una apuesta que no quiere rechazar otras. Si en algún momento, otra expresión del rodriguismo, del MIR, o del PC da pie con bola, nosotros vamos a ser los primeros en ponernos en la fila, porque nos interesa la revolución. Pero ahora pensamos que las cosas marchan como te lo he descrito.”

¿Se reúnen los rodriguistas?

“Hace más de un año estamos en una coordinación rodriguista (MPMR, Manuel Cabalga de Nuevo, Octubre Revolucionario, Portal Organización, parte de Izquierda XXI, rodriguistas independientes) que fue la que hizo el acto aniversario del Frente el 2007. En la coordinación no está el rodriguismo que vive al interior del PC ni el FPMR-Autónomo. Con la coordinación hemos estado en distintos seminarios, encuentros, compartido documentos, y nos hemos encontrado con puntos en común y voluntad de construir. ¿Serán una orgánica futura única? Eso no está resuelto. El tiempo lo dirá.”


Andrés Figueroa Cornejo
Miembro del Polo de Trabajador@s por el Socialismo
Abril de 2008

Chile:Trabajadores de banco Ripley podrìan ir a huelga por pobre oferta de la empresa

Están en plena Negociación Colectiva y el 15 de abril, deciden

El Sindicato de la Empresa Banco Ripley –retail de una de las tiendas comerciales más poderosas del país- está en plena Negociación Colectiva con la Administración.
Se trata de 170 trabajadores que presentaron su proyecto colectivo el 6 de marzo de 2008. Muchos funcionarios bancarios obtienen por su trabajo un sueldo base mensual de $ 151.000 pesos (menos de 300 dólares y un poco más del sueldo mínimo). La organización sindical está solicitando un salario mínimo de $ 260.000 pesos (500 dólares), más un conjunto de mejoramientos en las condiciones laborales.
Sin embargo, la Empresa, hasta el momento, ha ofrecido bonos que van entre 5 y 15 mil pesos (menos de 10 y 30 dólares) que se entregarían sólo a aquellos trabajadores que llevan más de dos años en el Banco, los cuales son apenas la mitad de los que están negociando.
Los dirigentes sindicales informaron que el 8 de abril expusieron a sus bases un estado de avance de las conversaciones, el cual fue unánimemente rechazado por los empleados. Asimismo, los representantes de los trabajadores manifestaron que los funcionarios del Banco “se encuentran decepcionados y menospreciados por la Administración.”
El próximo 15 de abril debe realizarse la votación respecto de la última oferta del Banco. A través de una mediación legal, la negociación puede extenderse 5 días más, y, si lo solicitan ambas partes, otros 5 días.
Ante la pobre oferta de la Empresa, los dirigentes sindicales no descartan enfrentar un proceso de huelga.

Andrés Figueroa Cornejo
Departamento de Comunicaciones
Sindicato Nacional de Trabajadores Empresa Banco Ripley



Abril 10 de 2008

martes, 8 de abril de 2008

Chile: La concertaciòn derrumbada y la CUT de Martìnez



1. El 3 de abril, ante la expectación de la clase política, la versión de la derecha histórica del bloque en el poder agrupada en la Alianza por Chile y seguida por los desprendimientos demócrata cristianos cada vez más francos hacia ese sector, dieron un golpe de fuerza política por arriba, con la acusación constitucional, e inminente caída de la Ministra de Educación, Yasna Provoste, primera jefa de cartera suspendida de su cargo por mayoría simple parlamentaria desde la inauguración de los gobiernos civiles post dictadura. Si bien todavía falta la votación del Senado para sancionar definitivamente la exoneración de Provoste, la actual composición de la Cámara Alta , hegemonizada por la Alianza por Chile y la ala derechista de la DC y el ex PPD (llamada Chile Primero, hoy), debería, simplemente, confirmar la sanción de los parlamentarios (considerando que en el propio Senado están las jefaturas que indujeron lo ocurrido en la Cámara de Diputados).
En la forma de un castigo a un posible incidente de corrupción asociada a la dotación de recursos fiscales a la subvención escolar privada y la ausencia de la supervisión adecuada para evitar la millonaria pérdida, la derecha histórica, políticamente de fondo, dio un nuevo golpe a la Concertación , mientras Bachelet lucía de académica medieval en Londres y alentaba la inversión de capitales británicos en Chile.
Con el giro hacia la diestra del llamado “sector colorín” de la DC , Adolfo Zaldívar –hermano de uno de los enemigos acérrimos del Presidente Salvador Allende durante la UP , Andrés Zaldívar- y ex líderes del PPD, la derecha ya es mayoría en ambas cámaras de acuerdo a los últimos hechos.
Ante los resultados de la votación –que descubren la descomposición profunda y explícita del conglomerado en La Moneda- el vocero del gobierno, Francisco Vidal, enfrentó la expresión “nueva mayoría”, acuñada por la derecha histórica, afirmando demagógicamente que “la mayoría se expresa en las urnas”. Vidal sabe perfectamente que ante un padrón electoral envejecido y descreído, donde más del 50 % se resta de cualquier opinión política en las encuestas, el impacto mediático del infortunio de Provoste, contribuye poderosamente a la creación de condiciones “atmosféricas” para evitar un quinto gobierno concertacionista.
Desde la llegada de los gobiernos civiles al Ejecutivo, verticalmente se ha propiciado la despolitización de la sociedad chilena, procurando su manipulación mediática y clientelar. El bloque en el poder, cuyos dos rostros únicos ofrecen sustento jurídico y político a los intereses del gran capital transnacionalizado, y cautelan con maña ejemplar el actual patrón de acumulación capitalista, ahora renuevan su polarización pre electoral en un escenario relativamente nuevo y descompensado. La Concertación -más por su agotamiento de sentido, errores de conducción, episodios de corrupción, disputas endógenas ligadas a la repartición política del complejo estatal, e incapacidad estratégica para revertir las condiciones de empobrecimiento y desigualdad de las grandes mayorías producto de una dinámica que, lejos, favorece al capital sobre el trabajo- concede enormes flancos a una ultra derecha, reaccionaria, rentista y atávicamente conservadora. Escaso de méritos propios, el rostro derecho del sistema político sin pueblo imperante en Chile, avanza a pasos agigantados, inclinando a su favor el equilibrio precario del articulado político dominante de cara a las elecciones, primero municipales, y luego parlamentarias y presidenciales.
Como se planteara en otro artículo, la mejor forma de inyectar “legitimidad” a un sistema político genéticamente antipopular y con una de sus expresiones en crisis, es el recambio aparente de la componenda en el gobierno.
La fotografía del actual escenario que protagoniza la camarilla política repetida y administradora del Estado burgués desde hace casi dos décadas, indica, provisoriamente, que ni con la incorporación de la izquierda tradicional y su magra votación –acaso más mellada ante su derechización- a su polo de influencias, se asegura el porvenir de la Concertación. Por el contrario. La derecha histórica, desmarcada formalmente de un Pinochet ya extinto, cuenta hoy con más posibilidades presidenciales para hacerse del Ejecutivo el 2009. Independientemente de que la Concertación jamás comportó una alternativa de consistencia popular y horizontes de una sociedad justa, igualitaria y democrática, en todas sus dimensiones. Ni siquiera encaró seriamente la redistribución del ingreso y la participación política de las mayorías; principios que cualquier gobierno capitalista y burgués con proyecciones estratégicas, considera y resuelve para contener la lucha de clases y cautelar su perpetuación.
La Concertación y la Alianza por Chile forman la trama bicéfala de un mismo bloque en el poder. Sus distancias sólo pueden advertirse –y no siempre- en el ámbito de las libertades privadas (como el derecho a la anticoncepción) y cierto diferendo en el plano cultural –desposeído, vaciado de contenidos auténticamente transformadores- por la ladera concertacionista respecto del conservadurismo de la Alianza. Sin embargo, en el mundo de las relaciones económicas estratégicas, maneras políticas y represión popular, se diluye toda contradicción sustantiva. La desesperación de la administración de la Concertación tiene más que ver con sostenerse en el Ejecutivo por prestigio político y prebendas estatales que por proyectos de país distintos en juego. Eso lo saben ellos, los empresarios y cada vez más, el pueblo. ¿No es posible ya prever un alto abtencionismo en las elecciones de 2009 ante un panorama confuso y distante para los de abajo?

2. El domingo 6 de abril terminó el VIII Congreso de la Central Unitaria de Trabajadores, que, pese a ser la principal multisindical del país, sólo conjunta, formalmente –mediante un sistema de representación indirecta que fortalece el control político sólo de militancia tradicional, principalmente de la Concertación- a alrededor de 400 mil trabajadores de los más de 6 millones de chilenos que forman la fuerza laboral.
Arturo Martínez, presidente de la Central y militante disciplinado del Partido Socialista del cual es parte la primera mandataria, Michelle Bachelet, señaló que en las elecciones de agosto de 2008 se presentará de nuevo “si no hay acuerdos y nos arriesgamos a debilitarnos.” Asimismo, es claro en exponer sus ganas de ser diputado en el Congreso, bajo la figura de “una gran alianza político social con los sectores democráticos y progresistas del país.”
Respecto del aumento visible de luchas laborales en el último tiempo –que abre un nuevo ciclo en alza gradual de la lucha de clases- y consultado sobre el eventual aterrizaje de un gobierno de la Alianza por Chile el 2009, Martínez dice que “eso cambia el cuadro totalmente, porque en la CUT buscamos muchas veces resolver (los conflictos) con diálogo, pero en un gobierno de derecha eso no va a ocurrir, nosotros no le vamos a apagar los incendios. Al contrario, vamos a estar en la calle permanentemente”. Al menos, los dichos del máximo dirigente de la CUT manifiestan con transparencia inmejorable el verdadero rol de “bombero” de las luchas sociales, luchas que, históricamente, han sido el único medio de enfrentar la dominación del capital y obtener mejoramientos auténticos de las condiciones de vida de los asalariados.
No es ningún secreto la relación de camaradería y apoyo a Arturo Martínez por parte del actual líder de la burguesía gremializada en la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Alfredo Ovalle. Para un importante costado de los dueños de todo, Martínez garantiza ser, justamente, un experto “bombero” y pieza significativa para cautelar la paz social –a costa de la expoliación mayoritaria que sufren los trabajadores- necesaria para mantener las millonarias tasas de ganancia del capital transnacionalizado imperante en Chile desde el golpe de Estado de 1973. Hasta hoy, al menos, una CUT de mando domesticado, extensión del Ministerio del Trabajo, cara “socialista” y nula autonomía, es el resultado de una fórmula del poder que ha rendido excelentes frutos. Es decir, por una parte, la burguesía tolera con indolencia ciertos discursos “aleonados” oportunistamente por Arturo Martínez, mientras tanto, por otro lado, en la vida real aumenta su tonelaje oligarca, la concentración de la riqueza, la tercerización y precarización del empleo, y la aplicación concreta del capitalismo a ultranza.
Con extraña transparencia, Martínez afirma que, de ganar la derecha histórica, ahora sí que la multisindical saldrá a la calle. En fin, ahora sí que luchará. Ahora sí que cumplirá el deber ético, político y social que dibujara estelarmente el fundador de la CUT , Clotario Blest en 1953, símbolo de la unidad anticapitalista y antiimperialista de los trabajadores chilenos.
No se puede servir a dos amos. No es posible representar los intereses profundos de los asalariados y al mismo tiempo, ser clave del puzzle colaboracionista y complementario de la burguesía reinante, en su expresión concertacionista o aliancista. La posición política de Martínez, en este caso, contraviene, “tranca la pelota”, obstruye y confunde la posibilidad de reconstruir a una fuerza de trabajo en lucha justa y que mañana aspire a un gobierno donde, en efecto, manden las mayorías castigadas por una minoría privilegiada.
En este escenario, es dable advertir cómo la táctica de la izquierda tradicional es finalmente, su estrategia. El espaldarazo e intento de ser tabla de salvación (con enormes y razonables dudas respecto de sus aportes electorales) de la izquierda tradicional a la Concertación , ante la debacle del conglomerado en el Ejecutivo, a cambio de lograr ingresar accesoriamente al parlamento articulado por un sistema político desacreditado popularmente, y funcional al orden capitalista, sólo crea confusión y desorientación entre las mayorías. Simplemente, la apuesta de Arturo Martínez revela, una vez más, su desconfianza respecto de los trabajadores en lucha, y que privilegia su tensa familiaridad y arribismo político y social en relación a la patronal.
En tanto, paulatinamente, acentuando los acuerdos, conviniendo los diagnósticos, traspasando la lucha puramente economicista y de colaboración con el empresariado, y apuntando los titulares de una plataforma de lucha para el actual período, distintos sindicatos, federaciones y confederaciones de trabajadores de diversos ámbitos apuran su reunión. Críticos a la actual dirección de la CUT , otros sectores de trabajadores organizados postulan su reconstitución sobre las vigas maestras de la independencia política de los trabajadores respecto del Estado y el empresariado, y la lucha a largo plazo hacia el establecimiento de un gobierno de los trabajadores y el pueblo. Aquí la CUT y el movimiento de los asalariados en general, aparecen en la forma de una refundación sindical en el marco de una amplia constelación de pueblo en lucha. Es decir, las organizaciones sindicales y la propia CUT se admiten como instrumentos necesarios, pero nunca únicos ni fetichizados, para la emancipación de las grandes mayorías en Chile. A través de una dinámica de cara al pueblo y los trabajadores, ya camina el proceso de acumulación de fuerzas anticapitalistas de una franja sindical con convicción de unidad, mayoría y poder.
El derrotero convenido está lleno de dificultades. No hay duda. Pero el imperio de la esperanza urgente alberga en su seno las potencias de un futuro donde, latinoamericanamente, ética insobornable y proyecto de alcances históricos y liberadores, funda el horizonte en la humanidad de un pueblo que recupera a diario su conciencia. Y por la convicción política y existencial de que la libertad auténtica sólo amanecerá cuando se termine con el reinado de la necesidad, la sobrevida, el capital y el egoísmo.

Andrés Figueroa Cornejo
Miembro del Polo de Trabajador@s por el Socialismo
Abril de 2008

lunes, 7 de abril de 2008

Chile: Los socialista sin Allende, la economìa rota y los salmoneros

1. Los capitales salmoneros de Aquachile ya están haciendo agua debido al conflicto que llevan adelante los trabajadores de esa industria, a los cuales se agregaron los últimos días mil obreros de la multinacional noruega Marine Harvest (del mismo rubro), que anunció el cierre de dos plantas de proceso y el despido de los trabajadores. Con 10 millones de dólares en utilidades, los dueños de Aquachile enfrentan la huelga de más de 50 días del sindicato de la empresa, quienes han recibido el apoyo solidario del conjunto de los trabajadores chilenos y la atención de la sociedad. Como si fuera poco, el The New York Times colocó en su portada que “El virus del salmón pone en tela de juicio métodos pesqueros chilenos”. Se trata del virus ISA, que afecta a 19 centros de cultivo entre la X y XI regiones. Las causas de la enfermedad de los peces estarían en el empleo abusivo de antibióticos, hormonas y pigmentos, químicos prohibidos en Estados Unidos. Pero las cosas no terminan aquí. Especialistas norteamericanos señalan que “Todos estos problemas están relacionados a la falta de control sanitario”, y al hacinamiento en el que habitan los peces dentro de sus jaulas, lo que agravaría la contaminación que afecta al ecosistema local. Más allá de la negligencia empresarial revelada, ¿El capital transnacional, golondrinamente, no querrá ahora beneficiar la producción del salmón en otras latitudes ante un movimiento obrero que pone en riesgo la paz de cementerios que demandan las altas tasas de ganancias de esa industria?
En los hechos, la movilización de los trabajadores ya tiene carácter internacional, y se mantiene firme en sus posiciones. Pese a que el conflicto está en pleno desarrollo y ya se extiende a gran parte de la producción salmonera –uno de los pilares exportadores, después que el cobre, la madera y la banca- plantea la fragilidad de la plataforma económica sobre la cual se edifica una de las aristas centrales del modelo de reproducción y explotación capitalista en Chile.
Los salmoneros en lucha mantienen sus demandas y cada día que pasa cobran mayor simpatía popular. Ellos exigen una remuneración de $ 350 mil pesos mensuales (menos de 700 dólares), escribiendo con su demanda la cifra del salario mínimo exigible por el conjunto de la fuerza de trabajo nacional. El buen porvenir de su movimiento templará la voluntad y confianzas propias de todos los trabajadores del país.

2. Según el oficialista Instituto Nacional de Estadísticas –considerando que sus métodos técnicos de medición están subordinados a custodiar los intereses y el “buen ver” de los gobiernos de turno- la cesantía aumentó un 7,3 % (527 mil 170 personas, en un país de alrededor de 6 millones de trabajadores), casi un punto más respecto de igual período de 2007. La V Región luce el triste título de mayor desempleo nacional con un 9,2 %, seguida de la VIII Región , con 9 %, y la I , con un 8,7 %. La ciudad con más desocupados, como se ha ido repitiendo sistemáticamente, es Valparaíso, con un 12, 4 % El que fuera uno de los puertos más importantes del Pacífico se hunde en la miseria y la ruina sin salida.
Mientras el Fondo Monetario Internacional –prestamista y baluarte del capital financiero mundial- ahora habla que USA crecerá el 2008, apenas un 0,5 %, entrando por la puerta franca de la oficialización de la recesión norteamericana, que ya contamina a buena parte de la economía planetaria, tanto desarrollada, como emergente y tercermundista. En Chile, el desempleo revela los síntomas primeros de la desaceleración económica.
Mientras el precio de la vida ha aumentado más de un 8 % en general (según las cifras entregadas verticalmente por el Estado); los alimentos y servicios alrededor de un 15 %; el sistema de salud privada (ISAPRES) un 12 %; los medicamentos, entre un 15 y un 20 %; y la crisis de origen agrícola argentino, encarecerá el precio de la carne; los trabajadores chilenos, en términos reales, aumentaron su salario el 2007 en menos de un uno por ciento. El descontento amplio ante el impacto de la desaceleración económica, la baja descontrolada del dólar que castiga las exportaciones asociadas a productos frutícolas; la crisis casi endógena de la pequeña y mediana empresa (a las cuales vende su fuerza de trabajo el 80 % de los asalariados del país), la cesantía y la caída libre del precio de las remuneraciones generales, con celeridad agrega a diario a más sectores de chilenos castigados objetivamente en su calidad de vida. Pero ya no se trata sólo de los pobres que colman los márgenes cartográficos de la sociedad chilena. Paulatinamente comienzan a dañarse los famosos “sectores medios”, la mitológica “clase media” chilena (más subjetiva que objetiva y colchón histórico de la lucha de clases en Chile). La precarización, empobrecimiento y proletarización de los pequeños comerciantes, áreas completas de profesionales y técnicos, y trabajadores independientes, mastican su desventura social primero calladamente, pero pronto manifestando su profunda disconformidad. Es posible hipotetizar que este sector, presa clave del sobreendeudamiento a través de instrumentos crediticios de consumo, ante las visibles manifestaciones de su empeoramiento social, termine un buen día por no poder pagar sus deudas. Ello, naturalmente, provocaría el colapso del sistema financiero y daría un golpe central a la fragilidad económica estratégica del Estado chileno (que ni siquiera podría paliar con sus ahorros coyunturales y finitos).
El pilar del patrón de acumulación capitalista en Chile se funda, por sobre cualquier industria, en el precio internacional del cobre. En la exportación cuprífera y su precio en el mercado mundial, especialmente asiático y puntualmente chino. Hasta ahora el valor del metal rojo ha alcanzado cifras pocas veces vistas producto de la demanda de las llamadas “economías emergentes”. Sin embargo, recientemente, el Banco Mundial –que no el marxismo internacional- acaba de reducir su pronóstico para China ante el deterioro de la economía usamericana y ahora prevé una expansión de 9,4 % para el 2008, dos puntos porcentuales menos que en 2007. Al respecto, el economista jefe de High Frequency Economics, Carl Weinberg, escribió una nota a sus clientes donde afirma que “creemos que una desaceleración del crecimiento (chino) a una tasa de un dígito estremecerá los mercados y bien podría desatar un repliegue en los precios de las materias primas industriales y energéticas.” Es decir, la contracción económica de China, impactará a la baja al actual precio del cobre, colaborando decidoramente con la crisis franca que le espera a Chile, y cuyos alcances todavía resultan insospechados.

3.José Antonio Viera Gallo, actual Secretario General de la Presidencia de Bachelet, ex presidente de la Cámara de Diputados y ex senador; socialista y uno de los hombres más influyentes en el Ejecutivo y al interior de su partido, ofreció una entrevista a la revista Posición, órgano de difusión del PS. A veces claro y a veces con un cinismo solapado, se refiere a la importancia que tiene para el gobierno el establecimiento del mal llamado “Pacto Social”, el cual, por arriba y sin pueblo, busca renovar el acuerdo interburgués entre la Concertación , el empresariado y la derecha histórica con el objetivo de enfrentar, a través de modificaciones ornamentales (como la reciente reforma previsional que termina por fortalecer el sistema de administración privado del ahorro forzoso de los trabajadores) y criminalización del movimiento social, la paulatina recomposición popular y nuevo ciclo de lucha de clases que signan el período actual.
Viera Gallo, recordando su exilio en Italia, dice que “he leído mucho a Gramsci, y siempre he entendido que los cambios de la sociedad son luchas muy complejas. Una parte muy importante de esa lucha se llama la hegemonía cultural, o sea, que las ideas propias se vuelvan sentido común en la sociedad.” El problema del personero gubernamental es que lee al genio político nacido en Ales, Cerdeña, y fundador del Partido Comunista italiano, mal y al revés. Es decir, por una parte, reduce el concepto de hegemonía al de “sentido común”, y por otra, lo plantea desde arriba, en colaboración explícita con la clase dominante, acotándola a las políticas mezquinas y palaciegas asociadas al “concenso”. En general, la hegemonía para Antonio Gramci tiene que ver con la combinación compleja de fuerzas capitaneada por los trabajadores y el pueblo, y encaminada hacia la toma del poder, en un contexto de alianzas subordinadas a los intereses medulares de los asalariados y capas subalternas. No, como dice muy suelto de cuerpo Viera Gallo, al “muñequeo politiquero” entre la clase dominante y sus expresiones más conservadoras versus las más “progresistas”. Para Viera Gallo, el pueblo no existe más que como material social a “representar”, y los trabajadores y el pueblo deben, simplemente, observar con paciencia bovina, cómo se resuelve en las alturas “la cuestión política”. Sobre lo mismo, el ministro, planteándose respecto de las posibilidades de la modificación al sistema político binominal, dice que “creo que para ello aún estamos lejos, todavía los temas del sistema electoral son “políticos”, no del ciudadano común y corriente”. La frase retorna con la violencia de un bumerang contra el rostro de uno de los líderes concertacionistas, toda vez que, justamente las camarillas partidarias del actual sistema político, desde el primer día del primer gobierno civil post dictadura se ha empeñado capilarmente en despolitizar al conjunto de la sociedad, desactivar sus organizaciones populares, destruir sus construcciones políticas y sindicales, y alentar la alienación social a través de todos los medios a su alcance. Primero con el argumento peregrino de no provocar al militarismo pinochetista, y luego con la razón de fondo ligada al control social necesario para la reproducción y beneficio del capital inversor transnacional. En resumen, la Concertación dice: la política para los políticos “profesionales”, y el pueblo a la galería, a la borrachera medial, y la a expoliación creciente.
Viera Gallo es fiel exponente de la centro derecha que, esta vez ciertamente, ha hegemonizado en el Partido Socialista. Ese conglomerado, luego de un Congreso de resultados confusos y pro capitalistas, debe renovar su actual dirección, hoy capitaneada por Camilo Escalona. Lo más probable es que allí las cosas queden tal cual están. La oposición interior más progresista es minoritaria. El allendismo es minoría. Salvador Allende para la mayoría conductora del Partido Socialista es decorado ético, pasado epopéyico, episodio épico irrepetible y sin retorno. Materia de brindis sofisticados, puro recuerdo sepultado. Una fotografía en sepia de un Presidente solitario y romántico, defendiendo con casco y metralla La Moneda en llamas.

Andrés Figueroa Cornejo
Miembro del Polo de Trabajador@s por el Socialismo
Abril de 2008